El Poder Ejecutivo reconoció que el tipo de cambio seguirá aumentando por debajo de la inflación. Prevé una fuerte expansión de la economía.
El Gobierno publicó este jueves sus primeras proyecciones para la elaboración del Presupuesto 2026. Allí, reconoció que el valor del dólar seguirá corriendo detrás de la inflación, y auguró que la economía seguirá creciendo. De acuerdo con Ámbito.
A través del «Informe de avance al honorable Congreso de la nación» sobre el Presupuesto General de la Administración Nacional, el Poder Ejecutivo estimó que la inflación será del 22,7% en 2025 y que el tipo de cambio nominal aumentará 20,4% anual, «resultando en una disminución promedio del Tipo de Cambio Real bilateral con el dólar de -8,6% en el año».
Concretamente, el oficialismo estima que el precio de la divisa hacia fin de año será de $1.229, exactamente el mismo valor de cierre de este miércoles.
En cuanto a la dinámica del Producto Bruto Interno (PBI), se calculó un crecimiento del 5,5% respecto de 2024. A nivel sectorial, se espera que un incremento del 2,1% en el agro, del 5,3% en la industria y del 7,6% en el comercio, mientras que no hay precisiones respecto de la construcción.
Por el lado de la demanda, se estimó que el consumo privado avanzará 7,2% y que habrá un salto del 22,7% en la inversión. En materia de balanza comercial, el Gobierno prevé un superávit de u$s4.913 millones, producto de un aumento del 19,6% en el valor de las importaciones y del 3,8% en el de las exportaciones.
Las prioridades del Gobierno en el Presupuesto 2026
En el informe difundido, el Gobierno destacó como pilares fundamentales de su política económica al equilibrio fiscal y la eliminación de la emisión monetaria, que permiten la desaceleración de la inflación y la corrección de precios relativos. A su vez, remarcó la relevancia de las reformas estructurales, plasmadas en la Ley de Bases, orientadas a fomentar la inversión privada y mejorar la competitividad.
«El equilibrio fiscal se mantendrá como un compromiso inclaudicable del Gobierno, acompañado por políticas que prioricen la contención social de los sectores más vulnerables y la revalorización del trabajo como eje integrador y organizador de la sociedad. Asimismo, se profundizará el proceso de desregulación y transformación del Estado con el objetivo de lograr un servicio público que haga un uso eficaz y eficiente de los recursos aportados por los ciudadanos», expresó el Ejecutivo.
Finalmente, agregó, «se continuará con el fortalecimiento de las áreas de defensa nacional y seguridad interior, para el resguardo de la soberanía territorial y con el fin de garantizarles a los argentinos la seguridad y orden público en sus vidas, para que puedan desarrollarse plenamente y en libertad».