El Poder Ejecutivo podría habilitar algún paliativo en materia de discapacidad y negociar una parte de los ATN con los gobernadores; necesita el apoyo de diputados que se ausentaron o se abstuvieron
Vetos de Milei en Diputados. Al Gobierno le quedan seis días hábiles para vetar las tres leyes que sancionó recientemente el Congreso: la que actualiza jubilaciones, la que declara la emergencia en discapacidad y la moratoria previsional. Mientras Javier Milei vocifera que “aquellos que no acompañen los vetos” serán “genocidas”, en la Casa Rosada comenzaron a hacer la matemática. Por ahora, solo asoman herramientas de negociación mínimas para evitar que el Congreso, con dos tercios de ambas cámaras, pueda insistir con las normas. Según informa: La Nación
Sobre la mesa está la posibilidad de que el Poder Ejecutivo ofrezca una alternativa para paliar la situación en el área de discapacidad. También se evalúa habilitar un reparto -en un volumen a definir- de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) para contener a algunos de los gobernadores “amigables” que vienen reclamando fondos.
No está claro si alcanzará. Cabe recordar que los 24 gobernadores impulsaron el proyecto que prevé el reparto del 50% de los ATN junto a una segunda iniciativa que busca coparticipar el impuesto a los combustibles líquidos. Ambos proyectos tienen media sanción del Senado.
Además de mínimas concesiones en materia de fondos, La Libertad Avanza (LLA) tiene que definir su mapa de coaliciones electorales antes del 7 de agosto. Esa vía política también le permitiría sumar aliados con algún impacto en la ecuación parlamentaria.
En busca de aliados
Si se presupone que la oposición buscará insistir con las leyes este año, la única opción que tiene el Gobierno para defender los tres vetos es evitar que en Diputados se alcancen los dos tercios de los votos para imponer el criterio inicial. Al Senado ya lo dan por perdido.
En la Cámara baja, el proyecto de jubilaciones obtuvo 142 votos afirmativos, 67 votos negativos y 19 abstenciones, con 29 ausentes. El cálculo que hacen en LLA es que parten de 67 avales al veto (los que ya rechazaron el proyecto) y que necesitan un piso de 72 héroes para alcanzar el tercio “salvador”. Se trata, desde ya, del cálculo más optimista, ya que prevé que no se sumarán voluntades a la defensa de la ley, que es por demás sensible.
La ley que declara la emergencia en discapacidad, en tanto, tuvo 148 votos afirmativos, 71 negativos y 3 abstenciones, con 34 ausentes.
“Vamos a estar bien”, aseguraron en el Gobierno, pese a que todavía hay un rosario de negociaciones pendientes. La mira del oficialismo está puesta en garantizar el apoyo de “al menos 33 de los 35 diputados de Pro”, de todo el bloque MID, de los cinco radicales “peluca” y de un puñado de legisladores que responden a los gobernadores y que en la votaciones iniciales se ausentaron o se abstuvieron.
Según pudo reconstruir LA NACION de fuentes oficiales, si bien Milei ratificó que va a vetar todo, la prioridad del Gobierno es sostener el veto a la ley previsional por su impacto fiscal: de acuerdo a las estimaciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), es del 0,49% del PBI para lo que resta del 2025 y un costo fiscal anualizado del 1,17% del PBI.
En el caso de la emergencia en discapacidad, en el oficialismo no descartan que el Gobierno ofrezca un paliativo a la ley que permita sumar voluntades en Diputados. Es parte de las conversaciones que Martín Menem viene manteniendo con el bloque Liga del Interior, de los cinco “radicales peluca”. Uno de ellos, el neuquino Pablo Cervi, dijo en las últimas horas en DiputadosTV: “En el caso de discapacidad estamos viendo la posibilidad de que se pueda hacer alguna revisión o algún gesto desde el Gobierno. Es un tema delicado”.
Respecto a la negociación con los gobernadores, altas fuentes del Poder Ejecutivo señalaron a LA NACION que el Gobierno no admitirá la coparticipación del impuesto a los combustibles pero que “se podría buscar una diagonal” en el caso de los ATN. “Eso puede ser”, dijo un funcionario en las últimas horas.
Por ahora no hubo gestiones concretas. Al menos no con los mandatarios de Juntos por el Cambio, pese a que tres de ellos -Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Alfredo Cornejo (Mendoza) y Leandro Zdero (Chaco)- se aprestan a cerrar alianzas electorales con LLA. “Cero diálogo por este tema”, dijo uno de los mandatarios de ese grupo. “Ninguna propuesta aún”, ratificó uno de sus pares.
Si LLA logra sentar a sus 39 diputados para defender los vetos, necesita, de mínima, sumar a los tres legisladores del MID (dos se habían ausentado en la votación de jubilaciones) y a casi todos los diputados de Pro. Originalmente hubo nueve legisladores de ese bloque que se ausentaron y tres que se abstuvieron. “Eso lo va a trabajar Cristian Ritondo”, dicen en el oficialismo, donde esperan que la alianza electoral con los amarillos en la provincia de Buenos Aires comience a rendir sus frutos.
Además, el Gobierno necesita el apoyo de un puñado de diputados que obedezcan a los gobernadores. LLA, por caso, acaba de confirmar su alianza electoral con Cornejo. Los mendocinos Pamela Verasay y Lisandro Nieri se abstuvieron en la ley de jubilaciones pero ahora podrían acompañar a Milei.