La Negra como se la conoce a Navarro fue repudiada en las redes sociales por escribir desde su cuenta de twitter insultos irreproducibles contra dos mujeres, que más allá de su estado actual en la política, su posición social o económica no dejan de ser seres humanos que merecen ser respetados y en caso de no estar de acuerdo los argumentos deben plantearse dentro del marco y el parámetro de la democracia y convivencia pacífica y no generando violencia, verbal, gráfica, mucho menos siendo una representante de la Legislatura de Chubut.
Lo mínimo que debería hacer la Diputada Viviana Navarro es pedir disculpas públicas, y sus pares en la Legislatura de Chubut deberían repudiar estas actitudes patoteriles propias de lumpenes de energúmenos que incitan a la violencia ante la falta de ideales y convicciones que defender con argumentos valederos en un plano de civilización. No es la primera vez que está diputada se comporta así, es reincidente en este tipo de conductas tanto dentro como fuera del recinto de la casa de las leyes.
Navarro tomó estado público nacional y provincial cuando le realizó «fuck you» a las personas que van a presenciar las sesiones legislativas, además es conocida por la gran cantidad de «ñoquis» que tiene, hasta a su propio esposo lo tiene de ñoqui. También ha solicitado varios días de viáticos para ir solo unas horas a comer cordero a la Fiesta Nacional del Cordero en Puerto Madryn. Estas acciones son normales para ella como el gritar e insultar en las sesiones, una escena que da verguenza ajena y nos lleva a considerar sino es necesario promulgar una ley que obligue a realizar pericias psicológicas a las personas que pretenden ocupar un cargo público.
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Y para el próximo turno electoral se espera del PJ Chubut que aunque sea ponga en la lista de Diputados a personas que sepan leer y escribir porque asistir a la Legislatura es como presenciar una charla en un pabellón de la cárcel en donde se están disputando el botín perdido.