Con la declaración de los primeros nueve testigos culminó la primera jornada del juicio oral y público por el homicidio de Jorge “el rubio” Martínez acontecida el pasado 16 de mayo de 2017 en la zona de la costanera local. La fiscal expuso su alegato inicial del caso sosteniendo que va a probar a lo largo del debate la responsabilidad y autoría del imputado José Carrizo en el presente hecho bajo la figura de homicidio simple. En contraposición la defensa propició su absolución encuadrando los hechos como homicidio cometido en legítima defensa.
La fiscal Cecilia Codina sostuvo en su alegato inicial que va a probar a lo largo de las jornadas del juicio el hecho acontecido el pasado 16 de mayo del año 2017, a las 18.00 hs. en inmediaciones de la plaza Soberanía, de la Costanera, en el sector de patinetas. Allí se encontraba el imputado José Carrizo, junto a otras personas. Se acerca la víctima Jorge Andrés Martínez manifestándoles algo. Se retiran y vuelven a la plaza, momento en que Martínez agrede a Carrizo con un palo. Seguidamente el imputado José Carrizo asesta dos puntadas a la víctima, una de las cuales provoca su deceso. Calificando provisoriamente el hecho como “homicidio simple” en calidad de autor para Carrizo.
En la exposición de su teoría del caso la defensora Claudia Torrecillas, aseguró que Carrizo ese día se levantó temprano a trabajar, pero no pudo llegar a su lugar de trabajo porque había paro. Se dirige a la plaza Soberanía a comer y tomar cerveza con unos amigos, momentos en que se acerca al grupo “el rubio” Martínez, que había tenido un conflicto previo con uno de ellos. Carrizo impide que agreda a uno de ellos, entonces recibe un golpe con un palo de parte de Martínez. Intenta irse de la plaza pero ante un nuevo ataque, tomó el único elemento a mano para defenderse. Es decir que Carrizo sufrió una agresión ilegítima, no provocada e inminente, por lo cual postulará su absolución, al final del debate por legítima defensa.
Por su parte el imputado accedió voluntariamente a declarar sosteniendo que aquel día se tomó un colectivo, se encuentra con la ruta cortada, entonces pasa con un compañero a retirar una campera y se van a la costanera a comer un choripán. Aparece “el rubio” y quiere robar un celular a uno del grupo, se le cae un cuchillo y lo amenaza que se vaya de la plaza porque lo iba a matar. “Me da un golpe en la espalda y otro en la cabeza”, donde le rompe los anteojos y lo hiere en la oreja. Entonces “me defendí”, se asusta y sale corriendo.
Una de las testigos fue un auxiliar de la justicia del área de Criminalística que realizó un informe fotográfico del lugar del hecho y una pericia escopométrica, de observación, medición y comparación de correspondencia entre dos cuchillos secuestrados en la causa y la herida de arma blanca que presentó el cuerpo de la víctima en la autopsia.
Luego siguieron las declaraciones de una sargento y un agente que fueron los primeros en llegar al lugar del hecho. Describiendo que aquella tarde se encontraban de patrullaje en el móvil y le informan por equipo que había una persona herida de arma blanca en la costanera. Cuando llegaron la víctima Martínez aún se encontraba con vida, pero fallece al minuto, recuerda.
También prestó testimonio el oficial de servicio de la Seccional Primera, aquella tarde, recordado que llega al lugar, toma intervención preservando el mismo, dando intervención al celular de guardia de fiscalía y a Criminalística. Asimismo realiza el secuestro de elementos de prueba, como videos e inspección ocular del lugar del hecho.
Presidió el tribunal de debate Mariano Nicosia, e integraron el tribunal Jorge Odorisio y Mónica García, jueces penales; por el Ministerio Público Fiscal se hizo presente Cecilia Codina, fiscal general, en tanto que la defensa de Carrizo fue ejercida por Cristina Sadino y Claudia Torrecillas, defensoras públicas.