La tradicional escudería Ferrari sumó hoy un nuevo capítulo a su desastrosa temporada 2020 con una prematura despedida del Gran Premio de Italia por parte de sus dos pilotos: el alemán Sebastian Vettel y el monegasco Charles Leclerc.
Ni el romanticismo de correr en su propia tierra fue inspirador para mejorar la producción de la casa de Maranello, que transita en el medio de una tormenta, tal como reconoció el pasado lunes su jefe, el italiano Mattia Binotto.
En el Autódromo Nacional de Monza, sede del GP italiano, Vettel fue el primer en decir adiós en la vuelta número cinco por un problema en su sistema de frenos.
«Piensas que la cosa no puede ir peor, pero la cosa va peor», lamentó el piloto cuatro veces campeón del mundo (2010, 2011, 2012 y 2013) en declaraciones al canal alemán RTL.
«En la primera curva noté que había un problema con el conducto de frenos traseros, en la primera curva no frenaba el coche; estaba claro que había un problema y se acabó todo», completó con resignación.
Cuando transcurría el giro 24 de 53, llegó el turno de su compañero de escudería, protagonista de un fuerte accidente en la última curva del circuito lombardo.
Leclerc perdió el control de la parte trasera de su auto y se estrelló a gran velocidad contra las defensas, pero despejó rápidamente el temor sobre su estado de salud cuando le avisó a su equipo que se encontraba en bien y logró salir del auto por sus propios medios.
Después de quedar fuera de los puestos de puntuación, el pasado fin de semana en el Gran Premio de Bélgica, Ferrari protagonizó por segunda vez en la temporada un doble abandono, al igual que en el GP de Estiria, por la segunda fecha.
En las ocho carreras disputadas este año, el equipo italiano logró apenas dos veces subir al podio con Leclerc, segundo en el GP de Austria, la primera fecha, y tercero en el GP de Gran Bretaña, el pasado 2 de agosto.
El monesgaco llegó a Monza en el quinto lugar del Mundial de Pilotos con 45 puntos, a 112 de distancia del líder Lewis Hamilton (Mercedes); mientras que Vettel lo hizo en el 13er. puesto con 16 unidades.
Antes de la carrera de Monza, Ferrari ocupaba el quinto puesto de la Copa de Constructores con 61 puntos detrás de Mercedes (264), Red Bull Racing (158), McLaren (68) y Racing Point (66) y seriamente amenazado por Renault, sexto con 59 unidades.
Ferrari es la escudería más ganadora de la historia de la F1 con 16 títulos (1961, 1964, 1975, 1976, 1977, 1979, 1982, 1983, 1999, 2000, 2001, 2002, 2003, 2004, 2007 y 2008).
EL GANADOR
En tanto, el francés Pierre Gasly, de la escudería AlphaTauri, se convirtió este domingo en el inesperado ganador del Gran Premio de Italia de Fórmula 1, donde el líder y campeón de la categoría, Lewis Hamilton, finalizó en el séptimo puesto por una sanción.
El podio de la carrera, que por primera vez en la temporada no tuvo un auto Mercedes, lo completaron el español Carlos Sainz Jr. (McLaren) y el canadiense Lance Stroll (Racing Point).
Fue un día soñado para el equipo italiano AlphaTauri, que tiene en sus filas al mecánico cordobés Nicolás Bianco, pues se trató de su bautismo triunfal en la F1 con esa denominación y del segundo si añade la victoria lograda como Toro Rosso en 2008, justamente en el mismo Autódromo Nacional de Monza.
Unos 4.371 días de aquel triunfo del alemán Sebastian Vettel en Monza llegó esta victoria de Gasly, un piloto de 24 años que celebró su primera consagración después de 55 carreras disputadas desde su ingreso al Gran Circo en 2017.