Se trata de Carlos Peinipil, quien solicitó una audiencia para ampliar su declaración y finalmente, por recomendación de su defensora, no lo hizo. En diálogo con Radio 3, la fiscal Ruth Moge cuestionó la situación y aseguró que al imputado «hay algo que no lo deja tranquilo».
Uno de los detenidos por la desaparición y supuesto crimen de José Crettón reconoció ante el juez que no duerme bien hace cinco días y la fiscal del caso, Ruth Monge, cree que es «puede ser cargo de conciencia por algo que no lo deja tranquilo».
Se trata de Carlos Peinepil, a quien en una escucha telefónica reconoce que al joven de 18 años, del cual no se sabe nada desde hace tres meses, le había pegado dos tiros y cortado el cuello.
El acusado, que se encuentra detenido en prisión domiciliaria en José de San Martín, había pedido días atrás ampliar su declaración ante el juez y se había generado la expectativa de que podría llegar a relevar donde estaría el cuerpo de José.
Finalmente en la audiencia de este jueves el imputado, por recomendación de su abogada, no declaró y sólo contó que «hacía cinco días que no podía dormir bien y por eso había optado por que lo ayuden a hacer un escrito para prestar declaración», contó la fiscal en diálogo con Radio 3.
«Creo que está situación la viene padeciendo creo desde que se cometió el hecho. No hay que olvidarse que esta persona cumple la prisión preventiva en su domicilio por razones de salud. Un día se descompensó en una audiencia. Se pensó que padecía epilepsia y se determinó que en realidad estaba sufriendo estrés por la situación que esta pasando», remarcó la investigadora del caso.
«Puede ser que hay algo que no lo deja tranquilo y es lógico», aseveró.
Recordó además que «en una escucha telefónica él (por Peinipil) reconoce el hecho y la forma con la que terminaron con la vida de José. En la misma contaba que no podía dormir, que se despertaba en la noche» viendo la cara del joven.
«En el audio hace referencia a que no van a encontrar a José porqué le pegaron dos tiros en la cabeza y que él le cortó el cuello. La grabación está a disposición de la Fiscalía y ofrecerá como prueba cuando se haga la acusación», añadió.
Para finalizar, la fiscal Monge criticó la actitud del imputado al pedir una audiencia para declarar y luego no hacerlo: «no pude entender cual fue el objetivo de esto. Esta situación no es común«.
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