La próxima puesta en circulación del billete de 20.000 pesos con la imagen de Juan Bautista Alberdi significará el retorno a la numismática nacional del autor intelectual de la Constitución de 1853 luego de veintitrés años, tras un paso poco recordado como efigie de las Lecop (Letras de Cancelación de Obligaciones Provinciales) que abrieron las puertas al lanzamiento de más de una decena de cuasimonedas en el 2001.
En esos bonos, Alberdi ilustró los billetes de 2, 5, 10, 20 y 50 pesos (por entonces cotizantes a la par del dólar), pero hay que remontarse a finales del siglo XIX para encontrar el primer antecedente monetario del prócer tucumano.
Fue 1882, en tiempos en los que aún se permitía la emisión del flamante peso moneda nacional a través de bancos provinciales, práctica que se llevó a cabo hasta 1890, cuando quedó centralizada en la Caja de Conversión, antecedente del Banco Central, para cuya creación hubo que esperar hasta 1935.
Banco Provincial de Santa Fe: Alberdi tenía un billete en vida
El Banco Provincial de Santa Fe fue el encargado de emitir un billete de 10 pesos con el rostro de Alberdi en su anverso, tal como se puede comprobar en el relevamiento que el investigador Marcelo Calniquer desarrolló en su sitio web billetesargentinos.com.ar.
Pero lo que no hubiera pasado de una emisión más en la historia del dinero en la Argentina, presenta la particularidad de haber elegido para ilustrarlo a un personaje en vida. Y hasta pudo darse la incomprobable escena en la que el propio Alberdi utilizara como medio de pago algún billete con su propio rostro.
Retirado de la actividad política y académica, Alberdi pasaba los últimos años de su vida en Francia, donde fallecería el 19 de junio de 1884. Su intención inicial había sido la de desempeñarse como embajador en ese país, pero la falta de acuerdos entre roquistas y mitristas impidió la concreción de su aspiración.
Otros casos
Si bien a 142 años de distancia la existencia de un billete con la imagen de una persona viva puede resultar algo extraño y hasta una muestra de desmedida idolatría, el billete de Alberdi no fue una excepción en una época en la que la proliferación de bancos emisores dejaba lugar al uso de rostros que rara vez volvieron a aparecer.
Julio A. Roca y su cuñado, Miguel Juárez Celman, tuvieron sus billetes en 1883, mientras se desempeñaban respectivamente como presidente y gobernador de Córdoba; a Dalmacio Vélez Sarsfield le cupo el honor en tiempos en que era ministro del Interior de Domingo Faustino Sarmiento, quien también tuvo su billete en vida en 1884.
Al listado deben sumarse Nicolás Avellaneda (rarísimo ejemplar de 5 centavos), Bartolomé Mitre (en por lo menos tres ocasiones), Lucio Mansilla y el propio Juárez Celman, quien volvió a aparecer en un billete emitido por el Banco de Córdoba en 1889, cuando ya ocupaba la Primera Magistratura.
Extranjeros en billetes argentinos
Pero el antecedente más remoto fue el de Simón Bolívar, de quien el “Banco de Buenos Ayres” (sic) imprimió dos billetes dos y tres años antes de su fallecimiento.
Bolívar no fue el único caso de un extranjero en la numismática nacional, al punto que compartió los anversos de los billetes con George Washington (ya fallecido por entonces), en una colección que también incluyó a Benjamin Franklin y William Penn, un político y pensador más conocido por estas latitudes por tratarse del cuáquero que ilustra los envases de una conocida marca de avena.
De todos modos, el caso más extraño fue el del brasileño Irineu Evangelista de Souza, vizconde de Mauá, quien en 1865 emitió billetes de 1 peso fuerte y 20 céntimos a nombre de su banco y los ilustró con su propia imagen.
Curiosidades de una interesante colección recopilada por Calniquer, en la que no faltan errores propios del poco conocimiento que los países donde se imprimían los billetes tenían de la Argentina, como la aparición de un canguro como parte de la supuesta fauna autóctona en uno de 1856.
Nuevo billete de $20.000
El Banco Central confirmó la llegada de un nuevo billete de $20.000, que tendrán una particularidad especial: no están impresos en Argentina.
El titular de la entidad, Santiago Bausilli, dijo al respecto que, cuando llegaron al Gobierno, «la Casa de la Moneda estaba explotada». Según dijo, no podían cumplir «con un servicio público que era facilitarle efectivo a la gente».
Bausilli precisó que el barco con la nueva moneda llega en octubre. Sin embargo, hay que programar todos los cajeros, por lo que la habilitación total tomará más tiempo.