El austriaco superó al alemán y se clasificó para jugar el partido del primer Grand Slam del año frente a Djokovic.
El austríaco Dominic Thiem ratificó su excelente momento y se instaló hoy en la final del abierto de Australia tras imponerse en semifinales sobre el alemán Alexander Zverev por 3-6, 6-4, 7-6 (7-3) y 7-6 (7-4), victoria que le permitirá ir en busca de su primer título de Grand Slam frente al serbio Novak Djokovic, actual campeón.
Thiem, de 26 años y quinto en el ranking mundial de la ATP, empleó tres horas y media para revertir un partido que le era adverso ante el teutón Zverev (7) e irá el domingo en busca del título ante el serbio Djokovic (2), quien ayer le ganó la otra semifinal al suizo Roger Federer (3) por 7-6 (7-1), 6-4 y 6-3.
El austríaco nacido en la ciudad de Wiener Neustatd, quien será el máximo favorito al título dentro de 10 días en el Argentina Open, se instaló por tercera vez en una final de Grand Slam, las anteriores en Roland Garros 2018 y 2019, con sendas derrotas ante el campeón español Rafael Nadal.
Thiem, entrenado por el chileno Nicolás Massú, quien lo convirtió en un tenista mucho más completo y agresivo, conquistó durante su carrera 16 torneos, uno de ellos la edición 2018 del Argentina Open, y llegó a nueve finales, las más importantes las mencionadas de Roland Garros y la del Masters de Londres de noviembre pasado, cuando cayó ante el ruso Daniil Medvedev.
El austríaco, vencedor en cuartos de final del mallorquín Nadal (1), había comenzado set abajo ante Zverev y así perdió el primer set, pero luego mejoró notablemente la eficacia de su servicio y también ajustó la devolución, y se llevó los tres juegos siguientes de un partido muy parejo.
Thiem ganó por la mínima diferencia merced a su mayor precisión en los momentos definitorios, donde sacó a relucir su actualidad, en la que se muestra mucho más sólido y consistente, y sobre todo con mayor fortaleza mental.
El nuevo finalista del abierto australiano estiró su ventaja en el historial con Zverev a 7-2, tras sus anteriores triunfos en Munich, Niza y Rolang Garros en 2016, en Rotterdam 2017, Roland Garros 2018 y en noviembre pasado en las semifinales del Masters jugado en Londres.
Las victorias de Zverev fueron en Beijing 2016 y Madrid 2018.
Thiem disfruta su gran momento e irá en busca de un nuevo desafío el domingo próximo, aunque no le será fácil ante «Nole», quien jugó siete finales en Melbourne Park y las ganó todas, y además quiere recuperar el número uno del mundo, algo que conseguirá si alza el título ya que desplazará a Nadal.
El historial entre ambos favorece a Djokovic con apenas dos partidos de ventaja, por 6-4.
El balcánico se impuso en los cruces jugados en Shanghai 2014, Miami, Roland Garros y Masters de 2016, Roma 2017 y Madrid 2019.
Thiem le ganó en Roland Garros 2017 y 2019, en Montecarlo 2019 y el año pasado en las semifinales del Masters jugado en Londres.
En tanto, en el cuadro paralelo de damas, mañana desde las 5.30 (hora de la Argentina) jugarán la final la española Garbiñe Muguruza (32) y la estadounidense Sofia Kenin (15).
Muguruza, campeona de Roland Garros en 2016 y Wimbledon en 2017, venció en semifinales a la rumana Simona Halep (3), mientras que Kenin, finalista por primera vez de un Grand Slam, le ganó a la local Ashleigh Barty, número uno del ranking mundial de la WTA.
El abierto de Australia tendrá en 2020 a una nueva campeona, ya que el año pasado el título quedó en poder de la japonesa Naomi Osaka, quien le ganó la final a la checa Petra Kvitova por 7-6 (7-2), 5-7 y 6-4, señaló Télam.