Cálculos oficiales ubicaron en $100,000 millones el impacto en el consumo del paquete de medidas para la clase media y los sectores mas vulnerables.
Los anuncios estuvieron vinculados con programas de estímulo al consumo y alivio a los salarios de los trabajadores que este año, en promedio, quedaron retrasados respecto de la inflación que los economistas prevén cerrará el año en torno al 55%.
El paquete comenzó con el congelamiento de las tarifas y el aumento a jubilados anunciado en la 10 de diciembre en el discurso de Fernández en el Congreso tras haber asumido como presidente.
Pero además se fijó ayer el freno a los aumentos de los peajes en rutas nacionales para los vehículos particulares que había sido dispuesto por la gestión de Mauricio Macri y cuyas tarifas actualizadas entraban en vigencia mañana 1 de enero.
Además se anunció la extensión por 30 días del congelamiento de las cuotas de los beneficiarios de los créditos UVA hasta que de acuerdo a la Ley de Solidaridad se establezca un mecanismo en el que las partes compartan los desequilibrios que fueron consecuencia de la inflación.
Además se decidió prorrogar por tres meses, hasta el 31 de marzo, el Plan Ahora 12.
También se suspendió un incremento en las naftas y se dispuso postergar el incremento en el impuesto a las ventas de los combustibles líquidos, hasta el 31 de enero próximo, según consta en el decreto 103/2019, publicado hoy en el Boletín Oficial.
Este impuesto, en general es trasladado a los precios de los combustibles por las petroleras.
El conjunto de medidas finalizó hoy con un acuerdo con supermercadistas y productores para bajar los precios de los productos alimenticios incluidos en el programa temporal de reducción de IVA que vence esta medianoche.
En la reunión se acordó que el porcentaje del IVA en la leche será de 0% y en otros productos crece progresivamente hasta el 10,5% para el caso del pan rallado y rebozadores.
Se estableció que como resultado de este acuerdo, el porcentaje de IVA de la leche será absorbido por las empresas con lo cual no habrá cambios en el precio para los consumidores.
Se acordó además abrir una mesa de negociación con el sector productor durante los próximos 30 días.
El resto de los sectores también acordó absorber un 14% del tributo para minimizar el traslado del IVA a partir del primero de enero.
De esa manera, productores y supermercados absorberán dos tercios del impuesto.
Además se informó que en los próximos días, la reducción del IVA estará disponible para los beneficiarios de la tarjeta Alimentar, la AUH y los jubilados que perciban el haber mínimo.
Para la clase pasiva se dispuso un bono de hasta $5.000 para los haberes mínimos y proporcional para aquellos que cobran por debajo de los $19.068.
Por otro lado, se relanzará el programa de Precios Cuidados que volverá a incluir productos de primeras marcas para transformarse así en un sistema de precios de referencia.
En los próximos días resta definir el bono que se pagará a los trabajadores privados a cuenta de las futuras paritarias.