Lo aseveró en diálogo con Radio 3 el intendente de Puerto Madryn, Gustavo Sastre. «Vamos a insistiendo en que la flexibilización no sea tan amplia, para no generar situaciones que después tengamos que padecer», advirtió. Deslizó la posibilidad del distanciamiento barrial en caso que se confirmen casos positivos en la ciudad, siempre y cuando esté garantizado el abastecimiento. «Personalmente uno y la familia que absorbe las preocupaciones sufrimos mucho lo que está pasando», aseguró.
«Pedimos en la reunión con el Gobernador extender la franja horarias de los pago rápidos para impedir el amontonamiento de mucha gente», indicó Sastre en el inicio de la charla.
«La reunión fue muy positiva y el acuerdo será enviado al jefe de Gabinete de Nación, Santiago Cafiero, para su evaluación», destacó sobre el encuentro del martes en Casa de Gobierno.
«Soy un agradecido de recibir un aporte del gobierno nacional, pero el Censo Poblacional de 2010 indica que deberíamos recibir al menos un aporte de 8 millones y medio de pesos. El Gobernador nos dijo que redujo el aporte a otros municipios para poder asignarlos a todos, porque venían sólo para los que habían solicitado», analizó sobre el controvertido reparto de los fondos de ATN.
«Si es necesario vamos a tomar medidas más drásticas, incluso distanciamientos barriales, siempre y cuando tengamos garantizado el abastecimiento», advirtió después.
«En Madryn tenemos los barrios bien sectorizados, la mayoría por una avenida. Pero tenemos que tener en cuenta que tengan una farmacia o un supermercado dentro del perímetro», fundamentó.
«A nosotros no nos cambia el panorama, siempre dijimos que trabajos como si tuviéramos el virus», dijo sobre el primer caso de coronavirus en la provincia, registrado en Comodoro.
«Se pueden aplicar o sacar muchas medidas, pero si no tenemos acompañamiento de la sociedad, se tira todo el trabajo por borda», consideró.
Destacó la decisión del Ministerio de Salud sobre el uso del barbijo: «demuestra que cuando lo recomendamos desde el municipio no estábamos tan equivocados».
«Recibimos inquietudes permanentes por la mano de obra de las empresas que construyen los molinos eólicos o de la circulación pesquera, hemos ordenado hacer algunas averiguaciones de determinadas situaciones. Hemos hablado con gerentes de las dos empresas de molinos eólicos, me han avisado cuando llegaba gente, en el caso de las personas que no tenían hecha la cuarentena hicimos que la realicen o no hemos recibido otro grupo que venía de Córdoba y otros también volvieron a sus ciudades de origen a realizar la cuarentena», analizó sobre determinados casos con la actividad industrial en torno a la cuarentena.
«Estamos haciendo prevención, vamos a preparar los espacios, Dios quiera que no los tengamos que utilizar, pero no podemos esperar que llegue la pandemia y no nos encuentre preparados», adelantó Sastre.
«Hemos recorrido diferentes lugares con los responsables del Área Programática Norte, es más complicado de lo que nosotros creíamos, por ejemplo los hoteles tienen alfombras o cortinas y juegan a favor del virus», explicó.
«Las medidas podrían endurecerse por prevención o porque la gente no toma consciencia, vamos a respaldar el accionar de la fuerza siempre y cuando no se cumpla con lo establecido, pero tampoco vamos a permitir los excesos», aseveró.
«Tenemos más medidas para seguir tomando, pero veremos si hacen faltas aplicarlas más adelante», señaló.
«Me he comunicado con el empresariado, pero para solicitarles apoyo, nos tenemos que dar una mano entre todos, es un ida y vuelta», dijo sobre la situación económica.
«El impacto es terrible, nosotros recién hace dos días pudimos abrir un espacio para recaudar y ha venido una mínima cantidad de vecinos. Hay sectores que no pueden, siguen con las puertas cerradas y la economía los asfixia día a día», admitió.
Blindaje de la ciudad
«Yo siempre prefiero basarme en el pesimismo, estar preparados para el peor escenario porque después es más fácil volver, estoy convencido que esto nos va a llevar varios meses, que no será fácil salir, primero tenemos que llegar al punto más alto de la famosa curva y después estar seguros de que podemos controlar la situación», argumentó sobre las medidas particulares que ha tomado el municipio.
«Es muy complicado, más porque me gusta estar encima de los temas, me cuesta mucho lo de las video conferencias o el mismo teléfono, más allá que explota todo el día, pero prefiero ver las cosas personalmente y por supuesto que eso afecta, porque después uno lleva la preocupación a casa, mis padres son mayores, mi esposa y mis hijos muchas veces padecen esas preocupaciones», confesó sobre su entorno familiar en relación a su responsabilidad como intendente.
«La cuestión no es sólo infectarse o no, toda la vida hemos puesto foco en el aspecto social y con estas situaciones se sufre y la familia articula este sentir, sentimos el dolor de toda la comunidad», aseguró Sastre.