La vicepresidenta Cristina saludó a militantes de diversas organizaciones sociales, políticas y estudiantiles y manifestantes autoconvocados que continuaban en la puerta del edificio para expresarle su apoyo y solidaridad.
Aún sin lograr salir de la conmoción por lo ocurrido anoche, Cristina alrededor de una treintena de personas aguardó esta tarde en la intersección de las calles Juncal y Uruguay para saludar a la exmandataria, quien salió de su casa pasadas las 16.20 con lentes de sol, saludó a algunos manifestantes y partió en automóvil sin que se informara cuál sería su destino.
Detrás del operativo de la Policía Federal Argentina, que se desplegaba a lo ancho de la calle Uruguay, aunque sin presencia de agentes de tránsito, los manifestantes expresaron su apoyo a la Vicepresidenta a través de cánticos, carteles y banderas de distintas organizaciones, provincias y de pueblos originarios.
«La llegué a abrazar, no puedo más, es un milagro verla viva con lo que pasó», expresó entre lágrimas Mónica, quien llegó desde la localidad bonaerense de San Miguel con su hijo. Ambos se abrazaban al grito de «¡Lo logramos, lo logramos!».
«Nos vinimos con mi hijo a las tres de la mañana y aguardamos porque teníamos toda la fe de que se iba a acercar. Ya me puedo morir tranquila», le dijo la mujer a Télam.
Y aseguró: «Se me sale el corazón, gracias (a Cristina) por tener vivos a mis viejos, por darme todo lo que me das cada día, por darme un techo».
Previo a seguir rumbo a Plaza de Mayo, donde miles de personas se congregaron desde el mediodía, los manifestantes se mostraron «emocionados» al encontrarla «bien y tranquila» a la Vicepresidenta.
«Uno ve las imágenes y realmente es un dolor enorme porque podría haber pasado lo peor. Estoy convencido de que Dios la salvó», sostuvo Carlos, quien viajó desde Concordia, Entre Ríos, para manifestar su apoyo.
El entrerriano acotó: «Tener la suerte de verla bien es una emoción enorme». Y, remarcó que el atacante «le gatilló en la frente, lo que pasó fue un verdadero milagro».
Cerca de las 14, el presidente Alberto Fernández arribó al departamento de la vice y se retiró 45 minutos después, sin realizar declaraciones a la prensa.
En el marco del undécimo día consecutivo de la vigilia frente al domicilio de la Vicepresidenta, ayer Fernando André Sabag Montiel, de 35 años y nacionalidad brasileña, disparó un arma que no llegó a expulsar la bala y fue detenido casi al instante.
Durante toda la madrugada, miles de personas siguieron congregadas en el lugar solidarizándose con la Vicepresidenta, y en las primeras horas de la mañana continuaban acercándose a la zona de Recoleta para demostrar su apoyo a la expresidenta.
El Poder Ejecutivo dispuso hoy un feriado nacional para permitir que la ciudadanía se manifieste en repudio al atentado y en defensa de la democracia.