El candidato del Partido Republicano se impone con casi el 60% de los votos, rompiendo un histórico tabú político en Chile y consolidando su liderazgo para el periodo 2025.
Con el 25,37% de las mesas escrutadas, José Antonio Kast se consolidó como el ganador de las elecciones presidenciales chilenas, alcanzando un porcentaje del 59,83% de los votos, frente al 40,17% de su contendora, Jeannette Jara. La diferencia de 19 puntos porcentuales hace que su victoria sea irremontable, ya que lidera en todas las regiones y mantiene esta ventaja desde el inicio del conteo oficial, según informó Ex Ante.
Este resultado rompe un precedente en la política chilena, ya que por primera vez en 36 años llegará a La Moneda un candidato abiertamente partidario del «Sí» en el plebiscito de 1988, cuando se apoyó la continuidad del régimen de Augusto Pinochet. Kast, de 59 años, es exdiputado, fundador del Partido Republicano y cuenta con una trayectoria marcada por propuestas firmes en seguridad, migración y reactivación económica.
Las propuestas y primeras acciones del nuevo mandatario
Durante su campaña, Kast centró su discurso en la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado, el control de la migración, además de impulsar la economía y atraer inversiones. Su estrategia buscó presentar un «gobierno de emergencia» para abordar los principales problemas del país. Tras su victoria, anunció que dará un discurso a la ciudadanía pasadas las 21 horas, y en los próximos días comenzará a definir su gabinete y las políticas públicas para los primeros 90 días de gestión, en lo que ha denominado su «plan de acción inmediata».
Su entorno indica que Kast priorizará acciones concretas desde el inicio, como lo demuestra su traslado a una oficina en calle La Gloria, en Las Condes, conocida como «La Moneda Chica», donde empezará a trabajar en la instalación del gobierno y en la coordinación de su equipo. Además, busca consolidar alianzas con partidos de Chile Vamos y otras coaliciones para formar un acuerdo de gobernabilidad.
El contexto del resultado y las implicaciones políticas
La elección, en la que por primera vez en Chile el voto fue obligatorio, convirtió a Kast en el presidente con mayor cantidad de votos en la historia del país. La victoria también representa un golpe duro para la izquierda, ya que Jeannette Jara obtuvo resultados por debajo de las expectativas, con cifras similares a las del rechazo en el Plebiscito Constitucional de 2022, cuando la opción Rechazo obtuvo cerca del 62%. La candidata oficialista, tras votar en Conchalí, enfrentó una campaña marcada por un escenario adverso desde la primera vuelta.
El triunfo de Kast simboliza un cambio profundo en la política chilena, rompiendo esquemas y abriendo un nuevo capítulo en la historia del país. Su próxima reunión con el presidente Gabriel Boric, prevista para los primeros días, marcará el inicio del proceso de transición y traspaso de mando.
Con una victoria contundente y un mandato claro, José Antonio Kast asume la presidencia de Chile en un momento crucial para definir los próximos pasos en su gestión y en la historia del país. La expectativa ahora está puesta en sus primeras decisiones y en cómo logrará consolidar su visión en un escenario político que también enfrenta desafíos internos y sociales.




