La Sociedad Cooperativa Popular Limitada (SCPL) de Comodoro Rivadavia anunció un nuevo corte de agua programado de 24 horas para Caleta Olivia, debido al bajo nivel de reservas del sistema
La medida, que rige desde las 9 de este viernes 24 de octubre, vuelve a afectar a una comunidad que atraviesa una grave crisis hídrica sin solución a la vista.
Un nuevo golpe a la ciudad sin agua
Una vez más, la ruptura de un caño de 900 milímetros del acueducto Cerro Negro dejó sin servicio a gran parte de Caleta Olivia. El incidente, ocurrido el jueves, interrumpió el flujo de agua proveniente de Comodoro Rivadavia hacia Santa Cruz.
Desde Servicios Públicos Sociedad del Estado (SPSE) se informó que se intentará mantener el suministro con unos 400 metros cúbicos de agua, aunque el volumen resulta insuficiente para cubrir la demanda de los vecinos.
La Gerencia de Acueducto y Acuíferos de la SCPL explicó que la medida se debe al bajo nivel de reservas, y pidió a la población “hacer un uso racional del agua disponible”. Sin embargo, en Caleta Olivia ya son miles los hogares que superan las dos semanas sin suministro regular, mientras que comercios y escuelas continúan paralizados por la emergencia.
Una crisis estructural que se agrava
El problema del agua en Caleta Olivia no es nuevo. Vecinos y especialistas coinciden en que se trata de una crisis estructural que combina infraestructura obsoleta, falta de inversión sostenida y vandalismo en las instalaciones.
A ello se suma una débil coordinación institucional entre la cooperativa comodorense (SCPL) y la empresa provincial SPSE, lo que retrasa los trabajos y complica la búsqueda de soluciones a largo plazo.
Mientras tanto, la población sobrevive con bidones, camiones cisterna y reservas domésticas, en un escenario que se repite año tras año sin una respuesta integral.
El pedido de la comunidad
Organizaciones vecinales y entidades locales reclaman que se declare la emergencia hídrica y que se tomen medidas urgentes para modernizar el acueducto y garantizar el acceso al agua potable. “No se trata solo de un servicio, es un derecho básico que se nos niega”, señalaron vecinos afectados.
Sin un plan de inversión concreto, la incertidumbre crece y la confianza en las instituciones se debilita. Caleta Olivia continúa esperando una solución definitiva a su histórica falta de agua.




