El mediocampista del seleccionado argentino de fútbol Javier Mascherano afirmó hoy que será «un soldado que va directo a morir» de cara al Mundial Rusia 2018 al que consideró como su «última batalla».
Mascherano, en conferencia de prensa desde el predio de la AFA en Ezeiza, emparentó su rol en el equipo al de un soldado porque estará «disponible» cuando el entrenador Jorge Sampaoli lo necesite.
El ex volante de River y Barcelona de España, entre otros clubes, afrontará con 33 años su cuarto mundial. Su debut fue en Alemania 2006 y también disputó Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, donde Argentina fue subcampeón al caer con Alemania.
«Está claro que para mí es la última chance. Ojalá podamos estar a la altura de la competencia. Lo más importante es mostrar a una Argentina competitiva», indicó el actual futbolista de Hebei Fortune, de China.
Afirmó que su única preocupación en sus quince años como jugador profesional fue «estar a la altura de la situación».
Remarcó que sabe que en el seleccionado debe rendir examen «todo el tiempo» especialmente en la previa de la Copa del Mundo.
Mascherano se refirió a la lesión del arquero Sergio Romero, uno de los nombres representativos de la generación liderada por el astro Lionel Messi, quien se perderá el próximo campeonato del mundo.
«Es una baja muy sensible no solo en lo futbolístico, sino en lo humano. Lleva diez años siendo titular en el seleccionado», apuntó el «Jefe».
«Son cosas del fútbol, pueden pasar. Hay que desearle lo mejor a (Nahuel) Guzmán y tirar para adelante. Hemos sufrido imprevistos, pero hay optimismo para que el día del debut el entrenador pueda contar con los 23 jugadores disponibles», agregó el ex Barcelona.
Por otra parte, Mascherano recordó las tres finales perdidas por este grupo de futbolistas. La serie comenzó en el Mundial Brasil 2014, con la caída ante Alemania por 1 a 0, y continuó en las ediciones de la Copa América 2015 y 2016 frente a Chile, ambos por penales.
«No hay una persona que me diga «perdieron tres finales». Viajo en avión, voy a comer y no me crucé a nadie que me recrimine eso», afirmó «Masche».
Para Mascherano, la Argentina «no está obligada» a salir campeón en Rusia. «Sí tuvimos la obligación en la Copa América de Estados Unidos en 2016», agregó.
Su trayectoria extensa en el seleccionado le valió conocer a diferentes entrenadores. En la última etapa, la Argentina estuvo presa del recambio constante, con nombres y estilo de juego diferentes, cuestión que atentó contra las buenas intenciones del seleccionado en las competiciones.
«Llamémoslo mala suerte pero cada vez que la Selección llegó a su pico de rendimiento el entrenador se fue. Pasó con (Alejandro) Sabella y (Gerardo) Martino. Luego vinieron (Edgardo) Bauza y (Jorge) Sampaoli con enormes presiones. Ojalá que las próximas generaciones tengan más tranquilidad», señaló el ex Liverpool de Inglaterra.
El subcapitán del equipo indicó cuál será la estrategia del equipo en el roce de la competición: «La idea de Argentina va a ser, a través de la posesión, tener una estructura y evitar las transiciones. Eso es lo que el 80% de los países usa para lastimarte».
En ese sentido, indicó que Alemania y España tienen ese estilo y que Brasil emplea el contraataque.
El seleccionado argentino retornará mañana a los entrenamientos desde las 10.30. Para el viernes, en horario matutino, estarán programados estudios médicos y por la tarde efectuarán una nueva práctica.
Los dirigidos por Sampaoli se entrenarán el domingo 27, desde las 10.30, en el estadio de Huracán con público de escuelas primarias, comedores infantiles, hogares y barrios de bajos recursos.