Él, como funcionario público a cargo de un área muy sensible; como lo es la seguridad de los chubutenses, y más en estos tiempos, debería demostrarle a todos los ciudadanos que razona bien, que no padece trastornos de personalidad –como algunos acusan—y que comprende acabadamente lo que le ordena a sus dependientes, como por ejemplo a la policía.
Esta idea de que el ministro –mientras dure en su cargo—sea sometido a un examen psicológico, del que todos los habitantes de la provincia tendríamos que conocer sus resultados; debería partir de la oposición, pero parece que los legisladores de Chubut están ocupando ese cargo solo para cobrar el sueldo a fin de mes. Y qué sueldo!!
Desde hace un tiempo que se observa a Massoni dando indicios de no estar equilibrado mentalmente. Algunos de sus empleados en el Ministerio de Seguridad –aquellos que no le ceban mate, no le llevan alcahueterías, o que no le son serviles y no hacen las locuras que a él se le ocurren, aseguran que por momentos lo desconocen. Que en cuestión de segundos pasa de la jocosidad a la agresión verbal, que involucra gritos, maltrato y destrato. Y ese no sería un comportamiento normal, encima de alguien que tiene a su cargo el Ministerio de Seguridad.
Ahora parece que Massoni busca despegarse de la brutal y despiadado operativo que hubo la otra noche en el barrio INTA en donde la policía reprimió a mansalva disparando con escopetas anti tumulto prácticamente a quemarropa contra vecinos del lugar e hiriendo a algunos de ellos.
Por lo que salió en algunos medios que todavía le rinden pleitesía dijo que va a sancionar a los efectivos que participaron de esas acciones. O sea, él mismo con su comportamiento y sus actitudes promociona lo que después castiga. ¿Cómo es eso? Está poniendo a la policía en contra de los ciudadanos ¿y no se hace cargo? ¿O Massoni tiene doble personalidad?
Esto último habría que indagar pidiendo entonces que se someta a un examen psicológico cuánto antes.