El por aquel entonces gobernador de la provincia le atribuyó haber “liberado zona” para que entraran a robar a una automotriz de Trelew de donde los delincuentes se llevaron 8 millones de pesos. Miguel Gómez era en esa época, en noviembre de 2016, jefe de la Unidad Regional local, cargo del que fue desplazado por orden de Das Neves.
Todavía resuenan aquellas encolerizadas expresiones del hoy fallecido Mario Das Neves cuando en una conferencia de prensa aclaró: “Una cosa es una renuncia y otra es ser echado: el comentarista policial de la Unidad Regional de Trelew fue echado por incompetente e ineficiente. Y porque registra en su corto paso una cantidad de delitos sospechoso de connivencia”, denunció Das Neves refiriéndose a Miguel Gómez, hoy, pese a esos antecedentes jefe de la Policía del Chubut puesto por el devaluado Massoni.
Miguel Gómez era jefe de la Unidad Regional y su hermano, Paulino Ramón; responsable de la seccional Primera. Después de aquel hecho ambos la pasaron mal en la fuerza, estuvieron durante varios meses en el letargo y a punto de ser despedidos; dados de baja.
Miguel se había tirado al abandono, su hermano terminó refugiado en una dependencia policial de Rawson; y cuando esperaban que de un momento a otro les llegara la expulsión, una mano salvadora los rescató. Al poco tiempo falleció Das Neves y se podría decir que “resucitaron”.
Esa es la historia que los Gómez hoy deben preferir olvidar, porque incluso todo lo que dijo públicamente Das Neves quedó en la nebulosa, nunca lo salieron a aclarar.
En la actualidad son, increíblemente, “la familia” que maneja la policía del Chubut, puestos allí por el controversial Federico Massoni a quien le rinden pleitesía y también cuentas de todo lo que hacen.
Los complementa en la difícil tarea que tienen –con la que se están llenando los bolsillos de plata— una hermana, Beatriz, la jefa de “Finanzas” de la fuerza. Una mujer que pasó de la noche a la mañana de ser agente de policía a comisario, algo nunca antes visto en ninguna policía de la Argentina.
Han pasado más de cuatro años de aquellos momentos de crisis para “los Gómez”. En el medio falleció el que por poco los quería ver presos y hasta la fecha no se sabe en qué quedó la supuesta investigación que habría ordenado Das Neves contra el actual jefe de Policía por aquella presunta connivencia con los delincuentes que asaltaron CAPSA en Trelew. Dentro de poco se va a cumplir también un nuevo aniversario del robo de los ocho millones de la automotriz y tampoco se conoció definición alguna del lado de la Justicia.
Así terminan siendo las cosas en una sociedad que no tiene memoria.
