El club maneja un perfil claro: un atacante argentino, con pasado en el Torneo Clausura y cuyo equipo jugará copas en 2026. Alexis Cuello e Ignacio Russo son los principales candidatos.
En el hermetismo característico de sus movimientos en el mercado de pases, Boca Juniors avanza en la búsqueda de un nuevo atacante para potenciar su delantera de cara a la próxima temporada. Aunque el gran sueño sigue siendo Paulo Dybala, el club trabaja en paralelo por otros nombres más accesibles. La versión que circula en los medios especializados, como el sitio Planeta Boca Juniors, indica que la dirigencia habría avanzado en las tratativas con un jugador ofensivoque cumple tres condiciones: es argentino, jugó el último Torneo Clausura y pertenece a un club que estará en copas internacionales (presumiblemente la Copa Sudamericana) en 2026.
La urgencia por un centro delantero es impostergable para el Xeneize. Con Milton Giménez en un claro bajo rendimiento y Edinson Cavani luchando constantemente contra las lesiones, el único jugador natural para esa posición es Miguel Merentiel. Esto obliga al club a moverse con celeridad.
El perfil del misterioso refuerzo y los nombres en la mesa
Desde el club se ha encargado de bajar el perfil del posible fichaje, aclarando que no se trata de una figura de peso consolidada, sino más bien de «un gran proyecto» que llegaría para pelear por un lugar. El perfil apunta a un jugador joven o en pleno desarrollo, con hambre de demostrar su valía en un equipo grande.
Ante este panorama, y descartados otros nombres de mayor renombre como Miguel Borja (con quien Boca desmintió cualquier contacto), dos jugadores emergen como posibilidades concretas:
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Alexis Cuello (San Lorenzo): Delantero de 25 años que viene de dos buenas temporadas consecutivas. En el Clausura 2025 marcó 5 goles en 16 partidos, mostrando un rendimiento interesante para el Ciclón.
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Ignacio Russo (Tigre): El hijo de Miguel Ángel Russo tuvo un año destacado en el Matador, con 11 goles en 39 encuentros. Su juventud y capacidad goleadora lo convierten en una alternativa atractiva y diferente para el ataque.
Un mercado complejo con sueños y necesidades inmediatas
La búsqueda de Boca se enmarca en un mercado de pases que se anticipa complejo y activo. Mientras se mantiene la ilusión latente por Paulo Dybala, y también suenan otros nombres como el volante Alan Lescano o el extremo colombiano Marino Hinestroza, la necesidad de un «9» es la más urgente.
La planificación para 2026 es crucial, ya que el equipo regresará a la fase de grupos de la Copa Libertadores tras dos años de ausencia. Este objetivo continental exige un plantel competitivo y con variantes en todas las líneas, especialmente en el ataque.
Una decisión que define el rumbo ofensivo
Más allá de si el elegido termina siendo Cuello, Russo u otro jugador que encaje en el perfil buscado, lo cierto es que Boca irá a fondo por al menos un centro delantero en este mercado. La decisión del presidente Juan Román Riquelme y su equipo de fútbol no es menor: definirán con qué tipo de atacante afrontará el equipo un año cargado de expectativas y la presión de volver a ser protagonista en todos los frentes.
El hermetismo prevalecerá hasta que el acuerdo esté cerrado, pero la Bombonera ya espera con ansias conocer la identidad del primer refuerzo que intentará devolverle los goles y la alegría al equipo de la Ribera. Información extraída del medio TyC.




