El riesgo país argentino escaló a niveles preocupantes, alcanzando cifras cercanas a Bolivia y superando a naciones como Congo, Kenia y Pakistán, según destacó un estudio privado publicado este viernes.
La medición se produjo tras la primera semana posterior a la derrota electoral del oficialismo en la Provincia de Buenos Aires, y refleja la tensión política y económica del país.
Según informó Infobae, la consultora Quantum, fundada por el exsecretario de Financiamiento Daniel Marx, indicó que el rendimiento de los bonos argentinos alcanzó el 14,2%, rozando el 14,5% de Bolivia y superando el 10,6% del Congo, 8,3% de Kenia y 7,9% de Pakistán. Todos estos países enfrentan “situaciones económicas o sociales muy complejas”, según el informe.
La curva de rendimientos y la volatilidad económica
Quantum señaló que, desde principios de año hasta mediados de agosto, el riesgo país promedio diario de Argentina fue de 708 puntos básicos, comenzando en 600 y llegando a 1.020 puntos el jueves previo al informe. “La elevada volatilidad observada se relaciona con particularidades de Argentina, y no con cuestiones que afectan a la deuda emergente soberana en general”, explicaron.
Entre las razones destacan la capacidad de acumulación de reservas, los movimientos cambiarios y los vencimientos de deuda en moneda extranjera, factores que se intensificaron tras el resultado electoral bonaerense. El informe agrega que esto deterioró las expectativas de cara a las elecciones legislativas de octubre, consideradas potencialmente decisivas para el Gobierno de Javier Milei.
Singularidad argentina: inversores miran a largo plazo
Quantum resaltó una característica particular: la pendiente negativa de la curva de rendimientos, donde los bonos a corto plazo, como el GD29 (18%), superan a los bonos a largo plazo, como el GD46 (14,7%). Esto indica que los inversores son más pesimistas sobre el escenario inmediato que sobre el futuro económico de Argentina.
La consultora concluyó que “superar la incertidumbre actual y alcanzar equilibrios monetarios, cambiarios y de acumulación de reservas permitirá que los movimientos de portafolio se orienten hacia una mayor demanda de bonos argentinos”. No obstante, advirtió sobre los vencimientos de deuda en 2026, que ascienden a USD 14.000 millones, incluyendo pagos del BOPREAL del Banco Central.
Tasas de interés y tensión cambiaria
La consultora Invertir en Bolsa señaló que el desarme de LEFIs trasladó la atención al aumento de tasas, que superaron el 40% en términos reales. En paralelo, el mercado cambiario registró récords: el dólar Banco Nación cerró en $1.465, al borde del techo de la banda, y el dólar al público subió $20 en la jornada, acumulando un incremento semanal del 7,2%.
Políticamente, la situación se complicó por la actitud de gobernadores previamente aliados al Gobierno, que expresaron su escepticismo ante la convocatoria política de Milei. Gustavo Valdés, de Corrientes, declaró: “Estoy cansado de irme a Buenos Aires al Gobierno y que me atiendan funcionarios de tercera línea”.
Por su parte, el equipo económico anunció un suavizamiento del apretón monetario para mejorar la disponibilidad de crédito y mitigar las tendencias recesivas. El presidente del Banco Central, Santiago Bausili, afirmó: “Dijimos que el fuerte apretón monetario era transitorio y ahora vamos a una situación de mayor normalidad”.
El riesgo país argentino refleja así la combinación de desafíos políticos, económicos y financieros que enfrenta el país, con impactos directos en la confianza de inversores nacionales e internacionales.