Das Neves contra los boliches en los que sus funcionarios son clientes

Das Neves reclamó dureza a
los intendentes para controlar boliches, pero a varios funcionarios les cayó
mal esta decisión del gobernador de ir en contra de los lugares en donde son habitué.

Uno de los boliches más cuestionados
por el Gobernador es Rexo, al que le apunta por narcotráfico y otras yerbas,
pero un dirigente  honesto del “ChuSoTo”,
 que no los hay en cantidad, nos comentó que
a Das Neves le está calentando la oreja un funcionario que tendría negocios en
la noche y uno no, sino como mil, que pretendería eliminar la competencia y
adueñarse de la noche valletana, para convertirse en el “Poli Armentano de
Chubut”, como el famoso dueño del Boliche Cielo en la década del 90 en Bs.As. Que
terminó asesinado por la mafia de la noche, las drogas y  la política.

¿Quién conocerá la noche
tanto como los funcionarios de Das Neves? Si de esto se trata Das Neves ha
elegido a quienes mejor conocen la noche, como Iván Fernández, el ex intendente
de Lago Puelo y actual subsecretrio provincial de municipios, conocido por la jerga de la noche por “la alta parranda” que
arma para festejar hasta el día del arquero.

A Iván Fernández le cayó muy
mal que Das Neves se metiera con el boliche Rexo en el cual es un reconocido
cliente accediendo a lugares vip y exclusivos, pero trascendidos dicen que se habría
dicho en los pasillos de fontana 50 que a Mario esto se le iba pasar cuando se dé
cuenta que están todos en la misma, ¿quién no se tomó una “Linita” en el
despacho del Tri Gober?, ¿o fumarse un porrito en el patio de Casa de Gobierno?,
¿quién no se tira una cañita al aire de vez en cuando con unos “gatitos” cuando
se sale de viáticos?’. Habría dicho alguien a quién la noche le gusta más que
el día.

Para muchos en el entorno de
Das Neves es cuestión de esperar a que se le pase la “chifladura” al mandamás,
ya que sólo piensan que es marketing y publicidad para tapar otras cosas, pero
para la sociedad urge que se purifique a la dirigencia política del consumo de
estupefacientes para que puedan cumplir con sus obligaciones y responsabilidades
porque algunos están tan deteriorados que no son responsables ni de si mismos,
a muchos basta mirarle la cara para darse cuenta que están duros como piedra
pero no de vergüenza, sino por el consumo de cocaína, la vergüenza ya es algo
natural para ellos que parece no tener cura, más fácil es rehabilitarlos de las
adicciones a las drogas que sacarles lo “sinvergüenza”.