Nicolás Pachelo es conocido por ser uno de los imputados por el crimen de María Marta García Belsunce, cometido en 2002. Pero esta tarde quedo detenido por su relación con una serie de robos en el country Tortugas, entre cuyas víctimas hay un banquero, un empresario gastronómico y la hermana del intendente de Pilar Nicolás Ducoté. El Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, monitoreó el operativo que tuvo lugar en el piso 11 de un edificio ubicado en la avenida Del Libertador al 100, en el barrio de Retiro, donde Pachelo, de 41 años, vive actualmente.
El detenido está acusado de haber cometido cuatro robos en el country Tortugas de la localidad bonaerense de Pilar durante el último fin de semana largo de Semana Santa.
Entre las víctimas se encuentran Osvaldo Brucco, dueño del restaurante Gardiner y de Happening, ubicado en la zona de Costanera Norte; Arturo Piano, director ejecutivo del Banco Piano; y Jaqueline Ducoté, hermana del intendente de Pilar, Nicolás Ducoté.
Todos los robos se produjeron en ausencia de moradores y, según los voceros, Pachelo fue registrado por una de las cámaras de seguridad del country escapando con una caja fuerte en la mano. Además, un medio hermano del detenido, que vive en el mismo barrio cerrado, lo reconoció en los videos del sistema de vigilancia como uno de los ladrones que quedaron filmados, según revelaron fuentes judiciales.
Por estos hechos, también se detuvo a un empleado del country Tortugas, quien sería la persona que le facilitó el acceso a Pachelo al barrio cerrado.
En el departamento del detenido se secuestraron elementos de interés para la causa, entre ellas prendas de vestir que podrían incriminarlo en la investigación, aseguró un vocero.
El ahora detenido está imputado por los delitos de «robo agravado y homicidio criminis causa», que prevén la pena de prisión perpetua, por el crimen de María Marta García Belsunce, cometido el 27 de octubre de 2002 en el country Carmel de Pilar.
Según los nuevos fiscales de la causa, Pachelo efectuó los disparos homicidas, en «coautoría funcional» con su entonces esposa Inés Dávalos Cornejo (39), cuando entraron a robar en la casa de la víctima -con la complicidad de los vigiladores del country- y García Belsunce los sorprendió.
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