A un sargento de policía le sustrajeron el auto de las proximidades de la Comisaría donde trabaja, y a unos dos kilómetros al noroeste de Trelew apareció prendiéndose fuego.
Lo quemaron a un costado de la ruta a Telsen en un extraño suceso que ocurrió anteanoche, al cabo de un día en el que la Policía en diferentes operativos recuperó cinco vehículos que habían sido robados.
Uno de esos rodados es una EcoSport que fue recuperada en la zona norte, al ser interceptada en la intersección de Moreno Norte y Juan Evans, a las pocas horas de que fuera sustraída del frente de un supermercado del sector céntrico. En ese procedimiento, realizado en conjunto por personal de la División Motos de la Comisaría Tercera y la Segunda, demoraron a su conductor, un joven de 17 años del que dicen que tiene antecedentes; que ya ha estado preso por robo.
También la noche del viernes, alrededor de las 21, hallaron oculta en el patio trasero de una vivienda del barrio Menfa, al oeste de la ciudad, una camioneta Chevrolet S 10 que había sido robada el pasado 4 de septiembre, cuando se encontraba estacionada en esa ocasión entre las calles avenida Julio A. Roca y Buenos Aires, en un sector del barrio Malvinas Argentinas.
El vehículo se encontraba en un domicilio de la calle O’Higgins al 400 y lo llamativo de este caso es que uno de los moradores del lugar, antes de que la Policía pida una orden judicial y lo allane, entregó la camioneta de manera espontánea, según se indicó.
En un procedimiento anterior y casi similar, habían recuperado una Toyota Hilux robada esta semana, a la que tenían tapada con una lona y unos cartones en el patio de una precaria construcción del barrio Primera Junta -en la zona oeste de Trelew-. El responsable del lugar, al ver que la Policía le tenía rodeado el domicilio optó por hacer lo mismo que en el caso anterior, permitirles el acceso a las autoridades y dejar que se lo lleven secuestrado. Ahora la Justicia deberá evaluar su grado de participación en el robo de automotor que se investiga.
En este contexto, a un policía que presta servicio en la Seccional Segunda le robaron el auto mientras estaba trabajando y se lo dejaron estacionado en el acceso a un establecimiento rural envuelto en llamas. Allí estaba terminando de quemarse cuando llegó el primer patrullero.
Se trata de un Volkswagen Suran al que ni siquiera las cubiertas le quedaron sanas, porque también fueron calcinadas por las llamas del incendio. El automóvil fue abandonado dos kilómetros al noroeste de Trelew, a un costado de la Ruta 8, el camino de ripio que conduce hacia la localidad de Telsen, y había sido sustraído de las inmediaciones de Ecuador y Belgrano: a la vuelta de la Comisaría.
