Argentina, con su emblema Luis Scola a la cabeza, debutó con una victoria sobre los coreanos por 95 a 69 y extendió su buena racha ante los nigerianos, con los que debió esforzarse el marcador del final, 94/81, fue más amplio del trabajo que le demandó.
La selección llega a este encuentro sin lesionados y con un equipo feliz y motivado luego de que Luis Scola se convirtiera, el lunes, en el segundo máximo anotador de la historia de los Mundiales.
Ante Corea, Hernández aprovechó la rápida ventaja conseguida y realizó varias modificaciones para darle descanso a los habituales titulares. Sin embargo, los argentinos tuvieron un gran desgaste el lunes ante Nigeria y por eso es probable que mañana ante Rusia haya muchas rotaciones.
El equipo comandado por Sergey Bazarevich, en cambio, sufrió en los dos partidos que disputó hasta ahora, aunque lograron el objetivo inicial de clasificarse para la segunda rueda del certamen.
La zona se completará con el choque que animarán, cuatro horas antes, Corea del Sur y Nigeria, ambos eliminados. En la segunda ronda, que se jugará del 6 al 9 de septiembre, se formarán cuatro grupos de cuatro equipos en los que cada seleccionado se medirá con los dos a los que no enfrentó en esta fase inicial. Los dos primeros de cada zona pasarán a cuartos, así lo informó El Chubut.