Tras el impacto del «lunes negro» con el derrumbe de los índices bursátiles y del petróleo de todo el mundo se comprobó una recuperación parcial de su valor perdido, con un rebote en el precio del crudo y en empresas líderes.
Los principales índices bursátiles del mundo recuperaron parte de valor perdido en la jornada de ayer, catalogada como «lunes negro» por la combinación de un derrumbe generalizado de acciones y del petróleo, ante la expectativa de un estímulo por parte del Tesoro norteamericano y de un rebote de más del 8% en el precio del crudo.
La noticia de que la administración de Donald Trump evalúa adoptar medidas impositivas para reactivar una economía afectada por el coronavirus ayudaron a reactivar hoy a Wall Street, aunque los mercados europeos continuaron a la baja.
Esta mañana, el presidente de los Estados Unidos afirmó que él y su equipo están considerando medidas que incluyen reducir los impuestos a trabajadores y ayudar a empresas como aerolíneas y operadores de cruceros.
En respuesta, el S&P 500 se recuperó un 4,9% respecto de ayer, al igual que el Dow Jones y el Nasdaq, aunque los tres índices continúan registrando pérdidas cercanas al 15% en el último mes.
La nota del día la dio la recuperación parcial del precio del barril de petróleo que aumentó casi un 11% para el West Texas Intermediate (WTI) al superar los US$ 34,36 por barril y un 8% en el caso del Brent, hasta los US$ 37,22 el barril.
El cambio en la tendencia del petróleo -que el lunes se desplomó un más de 30% en apenas una jornada, la caída más abrupta desde la Guerra del Golfo, en 1991- empujó al alza a las empresas energéticas como Chevron, con un promedio del 5% de aumento.
El efecto rebote también se advirtió en otras empresas líderes como Apple (7,2%), JP Morgan (7,9%), Microsoft (6,8%), Visa (6,7%) y Home Depot (7,2%), entre otras.
Sin embargo, la recuperación no llegó hasta los mercados de Europa, donde continuó la racha negativa de la jornada de ayer, fogoneadas hoy por la noticia de 168 muertes en apenas un día en Italia, que ordenó la cancelación de clases, espectáculos deportivos y el tráfico de ciudadanos en todo el país, salvo caso de extrema necesidad.
En consecuencia, el índice FTSE MIB de Milán cayó un 3,3%, cifra similar a la contracción del IBEX 35 en España -país apuntado como «el próximo Italia» ante la ingente expansión del coronavirus- que cayó un 3,2%, mientras que el CAC 40 de París y el DAX de Fránkfurt, perdieron un 1,5% y un 1,4%, respectivamente.
“Un fuerte repunte hoy, si de hecho se mantiene, no significa que la volatilidad, o incluso la peor, haya quedado atrás. Más bien, los inversionistas deben esperar giros continuos tanto hacia arriba como hacia abajo hasta que haya una mayor certeza sobre el coronavirus», sostuvo Greg McBride, analista financiero jefe de Bankrate.com.
El temor de los inversores se evidencia en el bajo rendimiento -incluso negativo- de los bonos soberanos a 10 años de las principales potencias del mundo: 0,80% en Estados Unidos; -0,80% en Alemania; -0,11% en Japón; -0,31% en Francia; y 0,23% en Reino Unido.