La concejal de Juntos por el Cambio analizó que hay un abandono del Estado al espacio público en el que se terminó asentando la feria popular.
Si bien no hizo referencia al procedimiento legal que se encuentra en marcha tras las acusaciones cruzadas entre feriantes y funcionarios del Municipio, la concejal Ana Clara Romero si estaba al tanto de que “había dos grupos que se estaban organizando de manera paralela, y que de alguna manera había una especie de disputa, no tenían el mismo objeto”.
Al aire de El Comodorense Radio analizó que “es una muestra clara de cuando el Estado, en este caso el Municipal, no asume un rol respecto del espacio público”.
Romero se explayó diciendo que “La Saladita funciona en un espacio público de la ciudad, entones cuando el Estado está ausente y no pone reglas claras, no hay responsables, y no hay reglas de juego para las personas que en definitiva están ahí ejerciendo su trabajo o haciendo su actividad en momentos tan difíciles. El Estado tiene que estar ahí controlando, tiene que estar sabiendo quienes están y qué se hace”.
“Después la Justicia investigará si realmente hubo un delito o no lo hubo y quienes estuvieron o no involucrados. Lo que sí es un dato y no se puede desconocer es que ese espacio público existe, que La Saladita funciona ahí hace tiempo y que la verdad que desde el poder Ejecutivo en esta falta de planificación de la ciudad de lo que son los barrios, para qué es cada espacio, eligieron mirar durante mucho tiempo para otro lado y estas son las consecuencias”, concluyó.