La UOM calcula que el año pasado ya se habían perdido seis mil puestos de trabajo en la industria electrónica. |
Las cifras de Afarte dan cuenta del impacto combinado del retroceso del consumo y el incremento de las importaciones. El Gobierno agudizó aún más el derrumbe con la implementación fallida del programa Precios Transparentes, que ahora revirtió parcialmente.
El relato oficial acerca de la recuperación económica que habría comenzado lenta pero segura con el inicio del 2017 se topa con obstáculos a diario. A los datos generales sobre producción industrial y la construcción, que registraron en febrero caídas de 6 y 3,4 por ciento, respectivamente, se suman nuevos números a los que tuvo acceso este diario y que dan cuenta del impacto de la baja del consumo y las importaciones.
Según datos de Afarte, la cámara que agrupa a las empresas radicadas en Tierra del Fuego, la producción de televisores en el primer bimestre es un 27 por ciento más baja que en el mismo período de 2016, mientras que la baja llega al 53 por ciento en aires acondicionados y al 40 por ciento en teléfonos celulares. El Gobierno de algún modo tomó nota de la situación y dio marcha atrás con Precios Transparentes, renovó Ahora 12 y Ahora 18 y lanzó Ahora 3 y Ahora 6 para calzado y ropa.
El propio Indec difundió días atrás un informe en el cual detalla que la actividad manufacturera cayó un 6 por ciento en febrero en relación al mismo mes del año pasado y en el primer bimestre acumula una merma del 3,5 por ciento. Todos los sectores de la manufactura local, sin excepción, mostraron caídas interanuales. Si se toma como medida el primer bimestre, la industria textil baja un 16,8 por ciento, seguida de edición e impresión (-9,5), siderurgia (-9,4), insumos de la construcción (-6,8), papel y cartón (-5,9), tabaco (-5,6), metalmecánica (-5,1), refinación de petróleo (-4,6), caucho y plástico (-4,3), industria alimenticia (-3,1) y sustancias y productos químicos (-1,8). El único rubro que zafa en 2017 es el automotor, que crece 11 por ciento.
En el caso de los electrónicos, Afarte relevó que en los primeros dos meses se produjeron 301.591 televisores, mientras que en el mismo período de 2016 fueron 414.082, lo que implica una caída del 27 por ciento. En aires acondicionados la merma fue de 83.650 unidades fabricadas a 38.977, un 53 por ciento; mientras que los teléfonos celulares se redujeron desde 1.728.307 a 1.036.350 unidades, lo que equivale a un 40 por ciento. “La razón es la caída de la demanda”, explicaron desde la entidad a este diario. Hace un año, la liberación de las declaraciones juradas de importación por parte del Gobierno permitió que el sector adquiera partes al exterior y se reactivó la producción para renovar stocks, porque las ventas fueron bajas. Ahora, con el consumo que no repunta, la comparación interanual arroja esas variaciones negativas.
Los números son una muestra de la crisis en la que se encuentra sumergida la industria fueguina. El dirigente de la UOM Rio Grande y diputado nacional, Oscar Martínez sostuvo días atrás que “la situación general de la industria se viene agravando producto de la política del Gobierno nacional, que tiene una velada actitud de reducir los puestos de trabajo en Tierra del Fuego, como una forma de disminuir, según ellos, el costo fiscal que tiene la industria. El panorama para este año es muy complicado”. El gremio calcula que el año pasado se perdieron 6 mil puestos de trabajo en el sector, entre despidos, retiros voluntarios, jubilación anticipada y baja de contratos temporales.
Página 12