RAWSON (Por Pablo Vernazza / Especial para ADNSUR) – Con la salida abrupta antes de la última sesión dejando a la Cámara sin quórum, el oficialismo logró ganar tiempo y evitar una batalla que estaba a punto de perderse por muy poca diferencia. Pero se acerca la hora en que la Legislatura volverá a sesionar para tratar el pliego de Graciela Mercedes García Blanco como nueva ministra de la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia, y todo parece seguir igual y sin modificaciones.
Esto quiere decir que hay 17 votos a favor y falta apenas uno para los 18 que exige la mayoría especial planteada por la Constitución. El tema es que un voto puede parecer poco en política, pero en este caso da la impresión de que hubiera un abismo, porque no parece haber opciones o resquicios para torcer alguna voluntad.
Yo puedo asegurar 13 votos, hasta ahí llega mi trabajo, el resto es tarea del FPV y del Tano” asegura el presidente del bloque del Chusoto, Jerónimo García. Y de este modo se refiere a que están asegurados los 8 diputados dasnevistas, los tres macarthystas y los dos de Convergencia. Pero los otros 5 votos para que García Blanco sea nombrada jueza de la corte, deberán salir del FPV, teniendo en cuenta que Cambiemos ya ha jugado sus fichas y de ninguna manera va a votar por el ingreso de la camarista.
Por el lado del bloque justicialista, ya desde el pasado jueves hay 4 votos asegurados: Viviana Navarro (que es la principal defensora de García Blanco en la Cámara), David González, Cecilia Torres Otarola y Gustavo Fita. Desde esta columna hace 45 días atrás se había adelantado que estos nombres era muy probable que acompañaran, y que también estaba entre los posibles adherentes el de Estela Hernández.
Pero la diputada de Trelew, que dicen algunos había prometido su voto a García Blanco a cambio del apoyo a la ley que declaró la Emergencia en Violencia de Género, aparentemente se echó para atrás a último momento.
Según ella misma explicó, porque no quedó satisfecha con las respuestas de la camarista, especialmente en materia de derechos humanos. Vaya paradoja, Hernández podría ser la responsable de impedir que se haga realidad la llegada de la primera mujer en la historia al Superior Tribunal, algo que había levantado como una bandera propia.
DI PIERRO, EL OPERADOR
Así las cosas, el principal operador de la aspirante a la corte -que no es otro que su yerno Néstor Di Pierro-, había movido sus hilos sobre los dos diputados más posibles de convencer (ya que no tiene diálogo con Touriñán como tampoco con Meza Evans, Dufour y Marcilla), que son el madrynense José Grazzini y el petrolero Carlos Gómez. Se comenta en los pasillos legislativos que el primero de ellos le había prometido al Tano que si hacía falta un voto, él se lo daba. Pero a último momento se echó para atrás, según explicó el mismo día de la sesión, “porque me apretaron del partido”, en alusión a amenazas de parte del presidente del PJ, Ricardo Mutio.
En el dasnevismo creen que Mutio no opera si no es por orden del intendente Carlos Linares, a quien ven detrás de esta movida, así como lo ven operando junto a Jorge “Loma” Ávila detrás de la postura de Carlos Gómez, quien el día del tratamiento dijo que “no me importa un juez más o un juez menos, a mí me importan los trabajadores petroleros” y exigió que el gobierno revierta decisiones de diferentes operadoras respecto a suspensiones y despidos en el sector, que por el momento son imposibles de cumplir. De este modo, dio a entender que va a vender caro su voto, a cambio de reivindicaciones para los afiliados a su gremio.
MUCHOS CREEN QUE EN EL FONDO DE ESTA DISPUTA ESTÁ LA INTERNA LINARES – DI PIERRO
El intendente comodorense sigue expresando que es amigo de su mentor político y que entre ellos la relación está intacta. Y a repite a quien lo quiera escuchar que él no se mete en el tema de la jueza. Pero no son pocos los que creen que a través de Mutio y de Ávila, el comodorense está jugando una guerra silenciosa contra Das Neves que afecta a su referente, y que sólo Di Pierro tiene los resortes para torcer ese camino.
Llegado a este punto, hay que decir que si estas voluntades de los diputados se mantienen sin cambios para esta semana, y el conteo sigue en 17, desde el gobierno comenzaron a hacer circular la versión de que el pliego de la camarista podía ser retirado. Se desconoce cuál sería el mecanismo, porque con la nueva ley que estableció un nuevo mecanismo se va haciendo camino al andar.
Quizás el mismo Ejecutivo desista del tratamiento o también se escuchó que la misma García Blanco, “para evitar el manoseo”, decida ella misma bajar su postulación. El objetivo sería no forzar una votación que sería insuficiente, aunque esto –claro está- no detendría la derrota para el gobierno.
Son horas decisivas y los teléfonos de los diputados seguirán sonando hasta último momento, pero de cumplirse este anticipo y de quedar trunca la postulación después de tantas horas gastadas en preguntas, declaraciones, licencias médicas, audiencias públicas, etc, esto sin dudas marcaría un feo antecedente para esta primera experiencia de la ley que establece un nuevo mecanismo de audiencia pública que vuelve todo un poco más “transparente”.
Y también empañaría la llegada de la primera mujer al Superior Tribunal, por lo que el reclamo por la demora de más de 50 años de la presencia del género femenino en la cúpula de la justicia, deberá esperar unos meses hasta que el gobierno logre “consensuar” con la oposición un nuevo nombre que pase los filtros que no se lograron en este caso.