El Tribunal de Casación de la provincia de Buenos Aires confirmó la pena de prisión perpetua a Fernando Farré, condenado por haber asesinado a su esposa de 66 puñaladas en 2015 en el country Martindale del partido bonaerense de Pilar, informaron fuentes judiciales.
La decisión la tomó la Sala V del tribunal, integrada por los jueces Martín Manuel Ordoqui y Fernando Luis María Mancini, al rechazar un recurso de la defensa que argumentó que existieron fallas en las instrucciones que les brindó el juez a cargo del debate oral a los jurados populares que arribaron al veredicto condenatorio.
Según las fuentes, Casación ratificó de esta manera la pena a Farré como autor penalmente responsable del delito de homicidio calificado por el vínculo matrimonial y por tratarse de un femicidio de Claudia Schaefer (44).
Ante esta situación, la defensa de Farré (55) podrá ahora recurrir la decisión ante la Suprema Corte de Justicia bonaerense.
El 6 de junio de 2017, un jurado popular declaró culpable a Farré, tras lo cual, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de San Isidro, a cargo del juez coordinador Esteban Andrejín, le fijó la pena máxima del Código Penal.
Además, el magistrado resolvió que el empresario sea privado de la patria potestad de sus tres hijos mientras dure la condena y de la administración de sus bienes.
Aquel día, el juez Andrejín instruyó al jurado y antes de que se retirara a delibrar le pidió que debatieran “de una forma justa”.
Cuando finalmente se leyó el veredicto, una mujer ubicada al fondo del recinto le gritó a Farré: «Sos un hijo de mil putas”.
En tanto, las fiscales Carolina Carballido Calatayud y Laura Zyseskind se abrazaron con sus asistentes y con Sandra, la hermana de Claudia, quien lloraba muy emocionada, mientras otros amigos y familiares se estrechaban en muestras de felicidad.
Mientras el jurado se retiraba, Andrejín los felicitaba y les señalaba: “Esto es por ustedes”, respecto a la reacción del público que participó de la audiencia final.
El veredicto se decidió un día después de los alegatos, en los que las partes resumieron la suma de las pruebas exhibidas durante todo el juicio y ofrecieron sus versiones y consideraciones finales a los doce jurados.
“Fernando Farré decidió matar a su mujer sin una gota de piedad, a sangre fría y de la forma más cruel, sin importarle las consecuencias”, había dicho Carballido Catalayud, quien solicitó al jurado que condenaran a Farré de la misma forma en la que finalmente lo hicieron.
La defensa se había opuesto a esa acusación al proponer dos posibilidades para Farré: que el ahora condenado estaba “enfermo” psicológicamente al momento de cometer el crimen y que correspondía declararlo inimputable o que atenuase la pena por “emoción violenta”.
Por su parte, Sandra Schaefer -quien tiene a su cuidado los tres hijos de Claudia y su asesino- contó que Farré sometía a su hermana a un “acoso importante”, que quería tener “un control absoluto” de todo lo que ella hacía y que días antes le había advertido que su marido la iba a matar.
En tanto, tres días después de ser condenado, el propio Farré dijo a la prensa que estaba dispuesto a que lo colgaran en la avenida 9 de Julio si esto servía para que no haya más femicidios y que creía que mató a su mujer porque estaba “enfermo”, ya que no planeó el hecho.
Mientras que esa misma semana, la familia de la víctima recibió una amenaza a través de un llamado telefónico que luego se determinó fue efectuada desde una línea ubicada en el domicilio del hermano del condenado.
El femicidio de Schaefer fue cometido el 21 de agosto de 2015, cuando la mujer fue junto a su abogado a la casa de fin de semana que el matrimonio alquilaba en el country Martindale para retirar sus pertenencias.
El encuentro se realizó en el marco de un conflictivo divorcio que incluía una denuncia de la víctima en la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema de Justicia y una exclusión de hogar del imputado del domicilio que compartían en el barrio porteño de Recoleta.
Cuando Schaefer fue al vestidor de la casa a retirar su ropa, Farré entró detrás de ella, cerró la puerta con llave y la atacó con dos cuchillos que previamente sacó de la cocina en forma simultánea.
La autopsia determinó que Farré le ocasionó con golpes y los cuchillos un total de 74 lesiones, y que la causa de la muerte fue el degüello que le hizo de espaldas con cortes que afectaron las tres cuartas partes de la circunferencia del cuello.
La Voz