Durante agosto la inflación en la Patagonia fue del 3,6% y a lo largo de los primeros ocho meses del año acumula en la región un 24,9%. Se trata de la segunda región con mayor inflación en el país en lo que va de 2018 detrás de la del Noroeste. En la medición interanual, es decir al comparar el Indice de Precios al Consumidor de agosto de 2017 con igual mes de este año, la suba de precios llega al 33,7%.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dio a conocer el jueves los datos inflacionarios de agosto y relevó durante ese mes una suba de precios promedio del 3,9% en el país, con un pico en agosto que llegó al 4,1% en el Gran Buenos Aires. Mientras, la suba de precios en la Patagonia fue del 3,6% y junto con el 3,4% registrado en Cuyo fueron los dos indicadores más bajos de todas las regiones. Sin embargo, en el acumulado de los primeros ocho meses del año, Patagonia es una de las regiones con más inflación en toda la Argentina.
El rubro que mostró un mayor incremento de precios durante agosto en la región patagónica fue el de las comunicaciones con una suba del 9,3%; mientras que por detrás se ubicaron el transporte con un aumento del 5,2%, seguido por el equipamiento y mantenimiento del hogar con el 4,6%. Los alimentos y bebidas subieron el 4,4% impactando fuertemente en los indicadores inflacionarios, según un análisis elaborado por el sitio El Extremo Sur.
Entre los meses de enero y agosto, la suba de precios en la Patagonia fue del 24,9%, superando al 24,3% relevado en todo el país y convirtiéndose en la segunda más elevada del país para quedar solamente por detrás de 25,4% medido en la región Noroeste.
A lo largo de los primeros ocho meses del año, los rubros que más se incrementaron en la Patagonia fueron: el transporte con 34,1%; equipamiento y mantenimiento para el hogar con 28,8%; el de vivienda, servicios públicos y combustibles con 28,2%; el de la comunicación con 27,7%; y el de los alimentos y bebidas con 25,9%.
INFLACION INTERANUAL
Cuando la comparación se efectúa respecto de agosto del año pasado, la inflación a lo largo de doce meses arrojó que en la Patagonia la suba fue del 33,7% y fue de las menores junto con el 32,7% de la región Noreste.
En todo un año los sectores más afectados por el proceso inflacionario patagónico fueron: el transporte con el 49,5%; vivienda, servicios públicos y combustibles con el 45,5%; comunicación con un 38,1%; equipamientos y mantenimiento del hogar con el 34,8%; y el de los alimentos y bebidas con registraron una suba interanual del 33,1%.
Durante los últimos doce meses la suba de precios en los alimentos y bebidas tuvo la mayor incidencia inflacionaria que se tradujo en 8,7 puntos de la composición del índice interanual que llegó al 33,7 puntos porcentuales. Los otros dos sectores que generaron un mayor impacto en el alto índice inflacionario fueron el transporte que aportó 6,5 puntos a la inflación y el de la vivienda, los servicios públicos y el combustible que agregó 5,2 puntos. Solamente estos tres rubros mencionados aportaron 20,5 puntos del total inflacionario anual.
La inflación núcleo patagónica –sin considerar las variaciones generadas por la estacionalidad y los precios regulados– fue del 3,4% en agosto, pero en los primeros ocho meses del año alcanzó el 24,7% y fue la más elevada del país.
Los precios de los productos de la canasta básica patagónica que más se disociaron de los valores porteños fueron los de la carne picada que en la región promedió 123,05 pesos por kilo contra los 95,14 pesos que cuesta en Buenos Aires; el detergente por 750cc que subió a 45,41 pesos contra 26,52 pesos y el de la docena de huevos que llegó a los 66,18 pesos contra los 53,55 pesos.
El kilo de papa en la Patagonia promedia 21 pesos contra los 16 que cuesta en Buenos Aires, la distancia en el precio del kilo de arroz va de 33,8 a 28,7 pesos y el pollo entero cuesta en la región 57,35 pesos contra los 51,58 pesos en el Gran Buenos Aires.
