Se trata de un trabajo de infraestructura que beneficiará a todos los vecinos de ese sector de la zona norte de la ciudad y que contempla una importante inversión por parte del Municipio local. Sobre el tema, el titular de la cartera de Obras Públicas, Luis Romero, expresó que “son obras que no se ven pero que dan una respuesta a la población con la reconducción del agua de lluvia para evitar anegamientos en las calles y viviendas”.
En ese sentido, el funcionario informó que la obra se encuentra en su segunda etapa de ejecución con un plazo de 90 días corridos aproximadamente y explicó que “cuando se creó una urbanización en la parte alta del barrio, se generó un aporte de napa importante en todo el sector y que se profundizó luego de la catástrofe climática del 2017, afectando a muchos terrenos con anegamientos de calles y de las propias viviendas”.
“Se fueron elaborando una serie de proyectos para dar una solución a la problemática y poder reconducir el agua de lluvia” afirmó y dijo que “ya se hizo un drenaje en la zona Este en la ladera del cerro lo que permitirá que los vecinos ya no sufran esta situación y puedan también acceder a otras demandas vinculadas al servicio de agua potable o electricidad”.
En ese tenor, subrayó que “son obras que no se ven pero que dan una respuesta real al pedido del barrio, sobre todo en la época de fuertes precipitaciones” al tiempo que indicó que “la segunda etapa del desagüe pluvial está en un avance importante, el objetivo es que una vez finalizada la obra se pueda reconducir al arroyo Belgrano”.
En cuanto a los beneficios que dará al sector, Romero explicó que “toda construcción de drenajes o pluviales, descomprime el tema de los aportes de las napas direccionándolas a un lugar determinado. En este caso, el sector tiene inconvenientes porque no es arcilloso ni tiene absorción, la idea es que el agua, mediante este desagüe, no quede sobre la superficie anegando los accesos y el interior del barrio”.