El cuerpo de la joven fue hallado en un pozo ciego de un aserradero. Ocurrió en la localidad bonaerense de José C. Paz. Por el caso hay dos detenidos. Uno de ellos es la ex pareja.
María Alejandra Martínez, la joven cuyo cadáver fue encontrado el miércoles en un pozo ciego de un aserradero de la localidad bonaerense de José C. Paz, fue asesinada de cinco balazos y tenía una pierna cortada post mortem, según los resultados de la autopsia, informaron fuentes judiciales y policiales.
Los forenses del cuerpo médico de la Policía Científica de San Martín le informaron al fiscal Carlos Hermelo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 18 de Malvinas Argentinas, que la causa de muerte fueron cinco disparos de un arma de fuego calibre 22.
Según las fuentes, la víctima presentaba uno de esos balazos en la cabeza y los otros cuatro distribuidos entre el tórax y el cuello. Los médicos también detectaron que, ya fallecida, a Martínez le cortaron la pierna derecha a la altura de la rodilla, aunque la amputación fue incompleta.
“Creemos que ese corte post morten fue realizado para poder acondicionar el cadáver en la cámara séptica donde el o los asesinos lo descartaron”, dijo un investigador policial. Los peritos recolectaron algunos proyectiles y vainas calibre 22 que fueron preservados para futuros cotejos balísticos.
Por el caso, hay dos sospechosos detenidos: su ex pareja y presunto autor material del femicidio, Rodolfo Vallejos, y Alfredo Ezequiel Pucheta (40), quien trabajaba como sereno en el aserradero situado en avenida Arturo Illia (ruta 8) y Valentín Alsina, de José C. Paz, donde fue hallado el cuerpo.
Hasta allí llegó el miércoles la Policía, luego de que una mujer se presentara de manera espontánea en la comisaría 2da. de José C. Paz para denunciar que habían asesinado a una mujer de nombre «María» y que el femicidio se había producido el 1 de octubre.
La mujer aportó a los investigadores las identidades de los sospechosos y tras una serie de tareas investigativas, la policía primero ubicó y detuvo en el aserradero al sereno Pucheta, y por la tarde, detuvo a Vallejos en la localidad de José C. Paz.
El principal sospechoso del femicidio es Vallejos, quien tenía una relación de pareja conflictiva con Martínez y además es investigado en otro expediente por venta de drogas, mientras que Pucheta podría haber colaborado en el hecho o en el descarte posterior del cadáver.
Ambos quedaron detenidos acusados del delito de “homicidio calificado por haber sido cometido contra una mujer y mediante violencia de género, agravado por su comisión con un arma de fuego”, que prevé una pena de prisión perpetua.
Entre Martínez y el imputado Vallejos existían denuncias previas cruzadas por maltrato y violencia de género que tramitaron en el Departamento Judicial San Isidro cuando ambos convivían en Villa Rosa, partido de Pilar.