Un correo electrónico del 13 de noviembre de 2007, incluido por los investigadores del Lava Jato, revela mucho sobre la red de protección que mantenía -no con mucho éxito- la vida de lujos de Fabio Luis Lula da Silva, Lulinha.
En el mensaje “Mocó dos Pica-Pau”, dirigido a Kalil Bittar y Jonas Suassuna, dueño de la empresa Gol, Lulinha relata sus preocupaciones sobre el apartamento que iba a alquilar en San Pablo por 7.000 reales (unos 1.700 dólares).
Lulinha pide en el mensaje que todas las cuentas relacionadas con la propiedad se registren a nombre de Gol.
“Como le dije a Jonas, la semana pasada, creo que todo lo relacionado con el apartamento que está a mi nombre es malo. No es gran cosa, incluso porque ahora puedo permitírmelo, pero cuando las cuentas empiezan a llegar a mi nombre, en menos de una semana los porteros se comunican, se lo dicen a los vecinos, estudian por adelantado, se lo dicen a Dios y al mundo. Es decir, va a ser un infierno”, escribe Lulinha en ese e-mail.
En el mismo mensaje, dejó en claro: “Jonás está de acuerdo conmigo en que podemos hacer todo en nombre de Gol”.
“La percepción de los beneficios de Fabio Luis, asumida y pagada por Jonas Suassuna, se remonta a 2007. Los correos electrónicos confiscados prueban que desde entonces Jonas, con la ayuda de Kalil Bittar, era el responsable de sufragar los gastos de alquiler de los inmuebles ocupados por Fabio Luis, del orden de 7.000 reales al mes”, registran los investigadores.