El vicepresidente de Aerolíneas Argentinas, Gustavo Lipovich, sostuvo que uno de los objetivos de la firma será traer pasajeros del exterior, potenciando el sector receptivo, para lo cual es necesario recuperar rutas internacionales. Además, confirmó que los vuelos regionales volverán a Aeroparque a partir del 11 de Mayo.
Lipovich indicó que “ya está decidido que habremos de reemplazar los aviones Airbus 340 que salen de servicio con Airbus 330, que son los que actualmente tenemos y la idea es reforzar la flota de largo alcance, con el mismo tipo de aeronave”. “La idea que manejamos es la de retomar rutas internacionales, para recuperar el sector receptivo y traer viajeros a la Argentina, que luego podemos distribuir ofreciéndoles destinos a cualquier parte del país. Aún estamos trabajando sobre el tema por lo que es muy pronto para hablar de que rutas particularmente, pero entre las que se fueron dejando de lado están Barcelona, Nueva York y algunas regionales “, destacó.
Lipovich valoró como muy positiva la medida de devolver al Aeroparque Jorge Newbery sus operaciones regionales y argumentó que “cuando se tomó esa decisión, la principal perjudicada fue Aerolíneas Argentinas y la medida en sí, no trajo el beneficio que había originado la decisión de trasladar los vuelos regionales a Ezeiza”. “Si comparamos el movimiento de Aeroparque del 2017, aún con la totalidad de los vuelos regionales, con el de 2019, sin esos vuelos, el cabotaje se redujo 5 por ciento y hubo un 24 por ciento menos de vuelos, por lo que el objetivo de llevar esa operación a Ezeiza para descomprimir Aeroparque y favorecer las operaciones de cabotaje, no funcionó y encima causó un perjuicio muy grande a Aerolíneas”, aseguró.
El funcionario agregó que “tampoco se cumplió con lo de incrementar los vuelos al exterior desde ciudades del interior porque solamente se concretaron en algunos destinos y se resintió en un 18 por ciento la demanda”. Lipovich anticipó que “a partir del 11 de Mayo estaremos nuevamente operando en Aeroparque para vuelos regionales. Creo que el plazo es suficiente para volver a poner en funcionamiento el sistema de operación que debió ser levantado hace poco más de siete meses”.
El directivo reconoció que en la actualidad la flota de Embraer se encuentra en una situación complicada porque “durante los últimos cuatro años no se hicieron los mantenimientos que el fabricante recomendaba. Esto no significa que haya estado en riesgo la seguridad operacional del avión, sino que son mantenimientos que deben realizarse y, en este caso, lo que se hacía era patearlos para adelante para no tener que realizar la inversión del mantenimiento”.