Las cuentas públicas registraron un déficit fiscal primario de $3.766 millones (62,4 millones de dólares) en el primer mes del año, frente a un superávit de $16.658 millones del mismo mes del año pasado, anunció este miércoles el Ministerio de Economía.
El resultado negativo obedece mayormente a un impulso del gasto social durante el comienzo de 2020.
El resultado financiero de enero, que contempla los pagos de deuda pública, resultó negativo en $90.818 millones (1.505 millones de dólares).
Durante enero, el pago de intereses se tradujo en erogaciones por $87.052 millones, lo que significó un incremento interanual del 13,5%, dijo el comunicado.
Los ingresos totales de enero ascendieron a $395.225 millones (+40,3% interanual), y en este capítulo, los ingresos tributarios avanzaron 39,2% en la comparación interanual y los aportes y contribuciones a la seguridad social se incrementaron un 37,6% respecto a igual mes del año pasado.
El gasto primario totalizó $398.990 millones, lo que representa un aumento del 50,6% interanual, precisó la cartera económica.
El 80% de este incremento está explicado por las prestaciones de la seguridad social que avanzaron un 49,3% y las transferencias corrientes, que lo hicieron a una tasa del 88,7%.
El comunicado agregó que esa dinámica «se debe a la movilidad del 8,74% otorgada para prestaciones sociales, el bono de $5.000 para 4,5 millones de jubilados y pensionados, y la puesta en marcha del programa de tarjetas alimentarias en el marco del Plan Argentina contra el Hambre».
Estas dos últimas medidas implicaron desembolsos por alrededor de $25.350 millones, sin los cuales el gasto primario hubiera crecido en sintonía con los ingresos fiscales (+41% i.a.).
Las transferencias corrientes a las provincias registraron un impulso de $9.536 millones respecto a igual mes de 2019, lo que representa un incremento del 79,8%.
En esta línea, las transferencias a universidades ascendieron a $13.485 millones (+70,7%).
Los subsidios económicos ascendieron a $30.987 (+76,4%) y mostraron una divergencia entre aquellos destinados al transporte (+34%) y a la energía (+125,5%).
El crecimiento de subsidios al área energética se explica en parte a la cancelación de deudas impagas correspondientes al ejercicio fiscal de 2019.