Así lo dio a conocer el gobernador pampeano, Sergio Zillioto, quien agregó a la demanda -que en su reclamo original pide no iniciar las obras hasta tanto se realicen los estudios de impacto ambiental correspondientes-, el alerta sobre la baja en el caudal del río Colorado y también incluyó el acuerdo que cerró con Río Negro.
La central hidroeléctrica Portezuelo del Viento se pretende construir en el río Grande (Mendoza), cuyo principal afluente es el río Colorado –límite entre La Pampa y Río Negro-, y por eso la provincia cuyana comenzó a recibir partidas de dinero tras un acuerdo del entonces presidente Mauricio Macri con el ex gobernador Alfredo Cornejo.
Ante la CSJN, en julio del año pasado, La Pampa reclamó que no se inicien las obras hasta tanto no se realice una evaluación de impacto ambiental sobre toda la cuenca del río Colorado, y que sea aprobado -o no- por Coirco, el comité del que participan las provincias de Buenos Aires, La Pampa, Mendoza, Neuquén y Río Negro.
Luego de conocerse ayer que el Gobierno nacional giró la cuota correspondiente a enero por un monto de 13.915.837 dólares, Ziliotto resolvió ampliar la demanda original, que ahora incluye el alerta por la baja del caudal del Río Colorado.
El pasado miércoles se reunieron Ziliotto y la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, en Casa de Piedra -un pueblo al sur de La Pampa- en donde acordaron una estrategia conjunta ante la crisis hídrica producida por la baja del caudal del Colorado.
En esa reunión, Carreras acordó también reclamar la evaluación de impacto ambiental por la que La Pampa envió una vez más a Mendoza y Nación a la Justicia, luego del histórico reclamo por el corte unilateral del caudal del río Atuel por parte de Mendoza.
A través de su cuenta de Twitter, el ex gobernador Carlos Verna -que demandó el año pasado a la provincia cuyana por Portezuelo- reseñó que «esa fue siempre la posición de La Pampa: Bienvenida Río Negro a esta posición».
En declaraciones a la prensa local, Ziliotto aseveró que la obra es «técnica e hidráulicamente inviable», y cuestionó que en Mendoza «están vendiendo que pueden generar 250 megas de potencia, algo imposible en base a la realidad del río, y hay que mirar su comportamiento en los últimos 100 años para entenderlo».