La Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) contará con una personería social, podrá formular un estatuto, afiliar trabajadores y conformar una comisión directiva.
El Gobierno de Argentina anunció este miércoles la creación del Registro de Asociaciones de Trabajadores de la Economía Popular y de Subsistencia Básica (Ratepsb), lo que en términos concretos significa un primer reconocimiento gremial de los trabajadores informales nucleados en organizaciones sociales.
Esta decisión, pionera en Latinoamérica, buscará dar más representatividad y permitirá canalizar en forma más ágil las demandas de esos movimientos.
A partir de la firma del acuerdo, la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) contará con una personería social, podrá formular un estatuto, afiliar trabajadores y conformar una comisión directiva provisoria. Además, apunta a pertenecer a la Confederación General del Trabajo (CGT), la central obrera más importante del país.
Argentina
Lanzada como gremio en diciembre de 2019, la UTEP engloba a trabajadores de cuidados, recicladores, vendedores ambulantes, artesanos, pequeños agricultores, productores independientes, así como cooperativas, fábricas recuperadas y «todas las formas de organización del trabajo que son creadas por el pueblo», explicó el secretario general, Esteban ‘Gringo’ Castro, a RT.
Para la UTEP, este reconocimiento simboliza la posibilidad de avanzar en la formalidad de un gremio que agrupa a millones que no tenían un ámbito institucional para poder hacer llegar sus reclamos de forma colectiva.
Va a ser el sindicato de «un sector que no tiene patrón visible, y por lo tanto no tiene recibo de sueldo en relación de dependencia», añadió el referente. También aclaró que el gremio defenderá a todos, sin importar si son afiliados o no.
En esta organización participan la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie, Corriente Clasista y Combativa (CCC) y el Frente Popular Darío Santillán (FDPS), todos espacios representativos de las luchas obreras surgidas durante la crisis de 2001 en Argentina.
La necesidad de integrar a un sector cada vez más importante
En la actualidad, en Argentina hay 6 millones de personas inscriptas en el Registro de Trabajadoras y Trabajadores de la Economía Popular (Renatep), lanzado a mediados del año pasado por el Gobierno nacional. El Renatep les permite a los miembros de este sector acceder a programas de empleo impulsados por el Estado como Potencias Trabajo, seguridad social y capacitación; participar de redes de comercialización y tener acceso a herramientas crediticias y de inclusión financiera.
El anuncio de la creación del Ratepsb, realizado por el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, desde la sede de la cartera en Buenos Aires, resulta clave para un país que ya tenía problemas de desempleo —actualmente hay un 11,7% de desocupados—, y que, devastado por la pandemia, ha visto crecer el trabajo informal como alternativa a la falta de oportunidades en el mercado laboral formal.
Desde el comienzo de la crisis sanitaria en marzo de 2020, con el otorgamiento del Ingreso Federal de Emergencia (IFE) por parte de la Casa Rosada para solventar la debacle económica, quedó en evidencia por la cantidad de trabajadores informales anotados que hay más de 9 millones de personas «en condiciones de invisibilidad económica», señala el ‘Gringo’. «Es decir, hacen a la economía, pero no son tenidos en cuenta para cuestiones crediticias, ni para mejorar sus condiciones laborales», agrega.
Fuente: RT