El biólogo molecular y biotecnólogo argentino Ernesto Resnik señaló que si bien «posiblemente todos vamos a infectarnos» con la variante Ómicron, es importante que «no ocurra todo en las próximas semanas saturando hospitales y complicando la economía», sino que sea en los próximos meses «cuando ya tengamos mejor protección de inmunidad y antivirales»
«La variante Ómicron es imparable, lo estamos viendo. Por suerte, tenemos buena inmunidad para prevenir la enfermedad pero no tenemos gran inmunidad para prevenir las infecciones, por lo tanto -y varios observadores dicen esto- es muy posible que en unos meses todos estemos contagiados», dijo a Télam Radio Resnik, quien reside en Estados Unidos.
Y continuó: «Ahora bien, tenemos en nuestro poder hacer que eso no ocurra en las próximas semanas o en los próximos meses, sino que se prolongue en el tiempo para hacer que no se saturen los hospitales porque cuando eso pasa la situación es peor para todas las enfermedades».
El especialista señaló que a partir del abrupto incremento de casos impulsados por la Ómicron, tanto en Argentina como en el resto del mundo, «lo que estamos viendo es que la economía, con tanta cantidad de personas contagiadas, se ve perjudicada porque las empresas no tienen personal, los transportes no pueden funcionar, etcétera».
En este contexto, Resnik indicó que «hay que continuar con la vacunación, llegar a los que no se vacunaron y entre ellos a niñas, niños y adolescentes; también -y esto está muy probado- no hay que permanecer en lugares cerrados sin ventilación, la ventilación es crucial».
«Necesitamos mejores barbijos, y esto tendría que ser una política de Estado, de hecho algunos países lo están pensando. No necesariamente los N95 que son el estándar de oro pero son muy caros, pero hay versiones como el KN95 y otras; esto es vital», sostuvo.
Y añadió: «Después hay otras opciones pero a más largo plazo; está claro que con las dosis de refuerzo es limitado lo que podemos hacer en términos de prevenir las infecciones y en términos de inmunidad después de la tercera dosis el agregado de otras dosis es muy pequeño; lo que habría que hacer es que las empresas que fabrican las vacunas apuren la versión Ómicron, y también se deberían apurar los antivirales, hay algunos muy efectivos».
«El futuro está en la inmunidad por vacunas y la administración de antivirales apenas doy positivo», concluyó.