El presidente Alberto Fernández y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, se reunieron este miércoles en Bali, Indonesia, en el marco de la Cumbre del G-20.
«Es muy importante que la Argentina mantenga el rumbo tal como lo hizo tan exitosamente durante los últimos meses», dijo Georgieva tras el encuentro en declaraciones a la prensa.
La reunión se realizó entre las 17.25 (hora local, 6.25 de la Argentina) y las 18.15 (7.15 de la Argentina) en el salón Tampa Ksiring del Hotel Meliá.
En el encuentro, Fernández estuvo acompañado por el canciller Santiago Cafiero; el ministro de Economía, Sergio Massa; y el embajador argentino en Estados Unidos, Jorge Argüello.
Por su parte, Georgieva estuvo junto a Gita Gopinath, consejera Económica y directora del Departamento de Estudios; Kristina Kostial, directora gerente adjunta del organismo; Christian Mumssen, director de Finanzas; y Krishna Srinivasan, director del departamento de Asia y el Pacífico.
En la reunión, se habló del costo de la guerra en Ucrania, con la idea de reducir las metas de pago de la deuda, mientras que, sobre el tema de los sobrecargos, Georgieva se comprometió a tratarlo en el board en diciembre próximo, dijeron fuentes oficiales a la agencia Télam.
Fernández y Georgieva habían tenido un último contacto el 19 de septiembre en Nueva York, en el marco del 77° Período de Sesiones de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, oportunidad en la que le había pedido una solución al «problema de los sobrecargos», una distribución «más justa» de los Derechos Especiales de Giro (DEG) y la creación de un Fondo de Resiliencia y Sostenibilidad.
En ese momento, el Presidente le había pedido a la titular del Fondo de que considerara la influencia negativa del actual contexto internacional sobre la Argentina.
En aquella oportunidad, Georgieva elogió ese día el avance del programa económico del Gobierno.
Además, Fernández le reiteró a la titular del Fondo su preocupación por encontrar una solución al problema de los sobrecargos, conocidos también como sobretasas que cobra el FMI; una distribución más justa de los Derechos Especiales de Giro (DEG) y la puesta en marcha del Fondo de Resiliencia y Sostenibilidad.