A partir del 1 de diciembre de 2024, el sistema de salud argentino tendría un cambio radical. Las principales prepagas como Swiss Medical, OSDE, Medifé y otras, ya no dependerán de las obras sociales para administrar los aportes de sus afiliados.
Esta medida, impulsada por el Gobierno de Javier Milei, busca simplificar los trámites, reducir costos y otorgar mayor libertad de elección a los usuarios.
La Superintendencia de Servicios de Salud (SSS) será la encargada de supervisar este nuevo esquema, a través del Registro Nacional de Agentes del Seguro (RNAS). Todas las prepagas que ofrezcan planes de salud financiados con fondos de la seguridad social deberán inscribirse en este registro para operar de manera autónoma.
La decisión de avanzar en esta dirección se tomó luego de que Swiss Medical decidiera convertirse en Agente del Seguro. La compañía argumentó que la intermediación de las obras sociales no generaba valor agregado y encarecía los costos para los beneficiarios.
Qué implica este cambio para los afiliados de las prepagas
En la práctica, los usuarios podrán enviar sus aportes directamente a las prepagas de su elección, sin necesidad de realizar trámites adicionales en una obra social. El Gobierno asegura que este proceso será sencillo y rápido, a través de la plataforma digital de la Superintendencia.
La medida se enmarca en una serie de reformas impulsadas por el Ejecutivo con el objetivo de desregular el mercado de la salud. A través de diversos decretos y resoluciones, se han modificado las leyes vigentes para otorgar mayor autonomía a las empresas de medicina prepaga y facilitar la competencia entre ellas.
Es fundamental garantizar una transición ordenada y transparente, asegurando que los derechos de los usuarios estén protegidos. Además, será necesario monitorear de cerca el impacto de esta medida en los costos de las prepagas y en la calidad de la atención médica.