China vuelve a sorprender con un modelo de caza de 6ta generación
Solo un día después de que un supuesto nuevo avión de modelo de 6ta generación chino surcara a plena luz del día los cielos de Chengdu, en la provincia suroccidental de Sichuan. Se ha vuelto a ver otro avión de combate que también es un diseño avanzado, sin cola e invisible. Ninguno de los dos aviones habían visto la luz hasta ahora y estas pruebas, según dicen los expertos del país asiático. Demuestran que China está superando a EEUU en el desarrollo de modelo de caza de 6ta generación.
Las primeras imágenes aparecieron ayer en las redes sociales. Mostraban un nuevo modelo de aeronave de combate que es similar al caza avanzado que supuestamente está desarrollando China desde hace años. La nave iba acompañada de un caza biplaza Chengdu J-20S que actuaba como avión de seguimiento para darle seguridad al vuelo.
Aunque las Fuerzas Aéreas chinas no se han pronunciado sobre estas imágenes. Los medios militares oficiales de Pekín sí han confirmado, aunque de manera tácita, las especulaciones. «Realmente parece una hoja», escribió en su cuenta de Weibo el periódico Defence Times, con sede en Chengdu, junto a una imagen de una hoja de ginkgo.
Un avión de combate más pequeño
Hoy, otro vídeo y varias fotografías de una segunda aeronave de similares características han empezado a aparecer de nuevo por redes sociales. El número de imágenes es menor que el de ayer y la calidad también es más baja. Lo que hace más difícil determinar detalles concretos del nuevo modelo de caza de 6ta generación. Lo que sí parece claro es que su tamaño es menor que el del avión que vimos ayer.
Las Fuerzas Aéreas chinas tampoco han compartido información sobre este nuevo caza avanzado que ha aparecido hoy. Algunas fuentes sin confirmar indican que el segundo caza ha sido desarrollado por la Shenyang Aircraft Corporation (SAC). Mientras que el primero es de la rival Chengdu Aircraft Corporation (CAC).
SAC ha llevado a cabo la producción de la familia de cazas polivalentes Flanker y de la familia de cazas furtivos de peso medio J-35. Mientras que CAC fabrica el caza polivalente medio J-10 y el caza furtivo pesado J-20. De hecho, el segundo diseño aparece en algunas de las fotos junto a un caza de la serie Flanker (posiblemente un J-16 biplaza). Lo que apuntalaría la idea de que se trata de un avión fabricado por la SAC.
Cómo es el nuevo caza
Según el análisis de las imágenes de The War Zone, el nuevo avión es ligeramente más pequeño que el que vimos ayer. También su forma es diferente. El avión de Shenyang, aseguran, tiene una sección transversal en forma de diamante. Que ofrecería una mezcla de baja observabilidad y capacidad interna útil para combustible y armamento.
Las imágenes disponibles hasta ahora no permiten distinguir si la aeronave tiene cabina. Así que puede tratarse de un caza de combate tripulado, pero también podría ser un dron o un avión híbrido capaz de volar de manera autónoma o con piloto.
En lugar de tres motores, como el avión que vimos ayer, el caza de la SAC parece ser un bimotor. Según explican los analistas de The War Zone, los motores parecen estar alimentados por lo que parecen ser entradas supersónicas sin desviador (DSI). A ambos lados del fuselaje delantero, debajo de la raíz del ala, y parecen tener una forma muy angular. Los expertos sostienen que el diseño de la SAC también muestra un tren de aterrizaje triciclo de aspecto más estándar, con ruedas simples en cada unidad principal. Mientras que el diseño de la CAC utiliza bogies de dos ruedas más robustos en el tren principal para adaptarse a su mayor tamaño y peso.
Lo que se sabe del modelo de ayer
Aunque apenas hay información de este nuevo avión de combate, muchos elementos de su diseño coinciden con el prototipo presentado en el Salón Aeronáutico de Zhuhai en 2022. Lo que sí sabemos es que el caza de combate que vimos ayer es mucho más grande. De hecho, el análisis de las imágenes apunta a que es incluso más grande que los actuales cazas chinos, los J-20.
Además, el nuevo avión no tiene cola y presenta una forma de ala delta modificada con líneas que se extienden hasta el morro y un fuselaje central que recuerda al J-20. Su amplio morro, dicen los analistas, podría albergar asientos para que los miembros de la tripulación estén sentados uno al lado del otro. Aunque no queda claro si se trata de un monoplaza o un biplaza en tándem. Es de suponer que un avión tan avanzado como este tenga adicionalmente la capacidad de volar de forma autónoma. Las imágenes también muestran dos tomas de aire cuadradas debajo del ala y otra situada encima del fuselaje y detrás de la cabina. La presencia de tres motores, dicen los expertos, puede ser indicativo del enorme peso de esta nueva nave.
Un caza letal a grandes distancias
Esta innovadora configuración sin cola supone un cambio clave con respecto a diseños de aviones de combate anteriores. El cambio hacia este tipo de diseño sigue las tendencias actuales de la aviación militar. Sobre todo las que vienen del NGAD de EEUU, ya que el diseño sin cola es clave para darle sus características furtivas que lo hacen indetectable a los radares. Este enfoque también mejora la eficiencia aerodinámica, especialmente para misiones de largo alcance que requieren vuelos de alta velocidad y crucero eficientes.
Sin embargo, el diseño también tiene desventajas. Su forma puede hacer más difícil la maniobrabilidad, incluso con sistemas avanzados de control de vuelo. Además, la ausencia de motores de empuje vectorial puede limitar su agilidad. A pesar de su poca maniobrabilidad, el resto de sus características lo convierten en un avión muy peligroso. Es capaz de atacar objetivos en el aire, en tierra y en el mar, ampliando enormemente el alcance de los cazas actuales. Esto pondría en peligro a los aviones cisterna, de transporte aéreo, de alerta temprana y control y de reconocimiento de sus enemigos. Los analistas aseguran que también podría realizar misiones junto con aviones no tripulados, lo que amplía su capacidad de ofensiva y su resistencia a los ataques.
Cuando se presentó el prototipo de este nuevo caza en 2022, el general Mark D. Kelly, entonces jefe del Mando de Combate Aéreo (ACC) de los EEUU. Aseguró que China ve la sexta generación de cazas de combate, incluidos los futuros aviones de combate tripulados. «En gran medida como lo vemos nosotros: una reducción exponencial de la firma [invisibilidad], una aceleración exponencial de la potencia de procesamiento y detección».