Evangélicos en el Congreso: quiénes son y cuál es su influencia política actual.
En el Congreso argentino hay nueve legisladores que profesan la fe evangélica o están vinculados a iglesias protestantes. La mayoría forma parte de La Libertad Avanza y, por el momento, no tienen agenda propia sino que apoyan la política del presidente Javier Milei.
Quiénes son los representantes evangélicos
Actualmente, dos senadoras y siete diputados se identifican con la comunidad evangélica:
- Senado: Nadia Márquez (Neuquén) y Vilma Bedia (Jujuy)
- Cámara de Diputados: Maira Frías (Chubut), Miguel Rodríguez (Tierra del Fuego), Mónica Becerra (San Luis), Andrea Vera (Buenos Aires), Santiago Pauli (Tierra del Fuego), María Celeste Ponce (Córdoba) y Lourdes Arrieta (Mendoza)
La mayoría ingresó a la política a través de La Libertad Avanza, aunque no existe coordinación formal ni proyecto legislativo común. Algunos mantienen relaciones personales o afinidades, pero no un bloque específico.
Trayectorias y perfiles destacados
Cada legislador presenta un recorrido diverso:
- Andrea Vera se graduó de médica en 2024 y se inició en política en Moreno, Buenos Aires.
- María Celeste Ponce se sumó al anarcocapitalismo durante la pandemia y creó la agrupación “Pumas Libertarios”.
- Maira Frías, con un perfil bajo, forma parte del movimiento “Nacidos para Gobernar” y tiene experiencia como directora de ANSES.
- Vilma Bedia fue docente y comenzó su camino político durante la pandemia, llegando al Senado con aspiraciones provinciales.
- Lourdes Arrieta se desempeña en comunicación social y lidera su propio bloque “Coherencia”.
- Nadia Márquez, pastora bautista, combina su rol religioso con la política desde Neuquén.
- Mónica Becerra, contadora y madre de familia, llegó a la política desde el trabajo comunitario vinculado a su iglesia.
- Jorge Pauli y Miguel Rodríguez, de Tierra del Fuego, provienen de familias de pastores y se involucraron en política a través de La Libertad Avanza.
Crecimiento del fenómeno evangélico en la política
Especialistas destacan que la llegada de evangélicos al Congreso responde a una mayor visibilidad y al fenómeno Milei, más que a una estrategia formal de las iglesias. Melisa Sánchez (Conicet) señala que la población evangélica ha ocupado espacios públicos desde hace casi 200 años, consolidando su visibilidad en la democracia reciente. Marcos Carbonelli (UBA) explica que el “desembarco evangélico” combina interés personal y la ventana de oportunidad política que abrió La Libertad Avanza.
Actualmente, no se observa una agenda legislativa unificada ni coordinación formal entre estos nueve representantes, aunque sí existen afinidades entre algunos. Su participación marca un cambio en el panorama político argentino y plantea interrogantes sobre la influencia religiosa en la agenda nacional.
La información fue recopilada según informó ADNSUR y la Red Federal de Periodismo e Innovación.




