Treinta y ocho postulantes que recibieron sus viviendas en Comodoro Rivadavia, en 2016 fueron aprobados por el Instituto Provincial de la Vivienda, aun teniendo muy pocos años de anotados en el Registro de Postulantes, que oficialmente tiene 12.602 inscriptos en la ciudad petrolera. Siete de ellos se habían anotado en 2015, es decir el año anterior.
Hay vecinos que llevan muchos años anotados en el Instituto Provincial de la Vivienda, siguen esperando y en muchos de los casos han padecido ilusiones frustradas porque a último momento los “bajaron”.
Cuando afirmamos que el gobierno no quiere entregar información para que la misma no salga a la luz, y se conozcan algunas de las múltiples “irregularidades” existentes en el IPV, no estamos equivocados.
El pasado 26 de enero ingresó a la Honorable Legislatura del Chubut una respuesta con contenido parcial, como ya es costumbre, a un Pedido de Informe que había solicitado la Diputada Marisa Gabriela Dufour, del FpV.
Del análisis de esa documentación se pudo confirmar que en Comodoro Rivadavia 38 beneficiarios que recibieron sus casas el año pasado, tenían muy poca antigüedad de inscriptos en el IPV Chubut, y no eran casos judicializados donde el Instituto tenía que respetar la orden de la Justicia.
Siete de los “beneficiados” tienen fecha de inscripción en el año 2015. Ocho de los “elegidos” se habían anotado en 2014. Seis ciudadanos figuran como inscriptos en 2013. Siete en 2012, en 2011 y 2010 dos de los adjudicatarios y seis vecinos se habían inscripto en 2009.
Es indignante lo que pasa en el IPV Chubut. Construye viviendas PCR, (pocas, caras y regulares) y en el proceso de selección y adjudicación se favorece a amigos/as del poder.
La información que permitió saber que en Comodoro Rivadavia, se entregaron en 2016 74 viviendas, y 38 de los beneficiarios tenían muy poco tiempo de inscriptos, comprueba algunas de las múltiples situaciones que hay que “emprolijar” en el IPV, según Mario Das Neves.
Por Luis Dupuy
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