El Ministerio de Educación, a través de la Dirección General de Educación Superior, trabaja en el análisis y redefinición de los diseños curriculares de la formación docente, para ponerlos en línea con el nivel secundario.
El trabajo comenzó el año último, cuando luego de un análisis conjunto con el Instituto Nacional de Formación Docente (INFod) a través de los Dispositivos Nacionales de Evaluación Curricular, en el que participaron docentes, estudiantes y equipos directivos, se llegó a la conclusión de que era necesario pensar diseños más articulados, que tuvieran mayor vinculación con los campos de destino.
“En la práctica se hace evidente una desarticulación entre algunas unidades curriculares. Hay consenso entre todos los actores de que la formación inicial debe buscar puntos de trabajo más integrados para la correcta formación de los docentes que van a estar en el sistema”, dijo la directora general de Educación Superior, Gabriela Lamberti.
Capacidades
El rediseño curricular va en línea con la resolución del Consejo Federal de Educación que establece un marco referencial de capacidades profesionales que se espera adquieran los estudiantes de la formación docente inicial.
Estas capacidades, se lee en la resolución, no se desarrollan de modo espontáneo sino que requieren de un largo proceso de construcción que comienza en la formación inicial y se consolida a posteriori, en el puesto de trabajo, a partir de la socialización profesional, las experiencias de formación continua y el acompañamiento de los directivos y los colegas más experimentados.
“El sistema formador debe garantizar al menos un primer nivel de apropiación, indispensable para que los egresados estén en condiciones de afrontar sus primeras experiencias laborales de una manera adecuada. Las capacidades son: dominar los saberes a enseñar; actuar de acuerdo con las características y diversos modos de aprender de los estudiantes; dirigir la enseñanza y gestionar la clase; intervenir en la dinámica grupal y organizar el trabajo escolar; intervenir en el escenario institucional y comunitario y comprometerse con el propio proceso formativo.
“La formación que se brinde desde los Institutos Superiores debe apuntar hacia esas capacidades entonces esta actualización de los diseños curriculares tiene que ver también con cómo colaboramos para formar en esas capacidades”, explicó Lamberti.
“Se propician diseños más articulados, más relacionados con las escuelas destino, con mucho peso en la práctica por eso forman parte de esta discusión docentes del campo de la formación específica, docentes de la práctica y estudiantes porque así, representados los tres campos, está presente la voz de todos los actores y todas las miradas”, agregó.
Lamberti, recordó que el año último se trabajó con los diseños de Educación Artística y Educación Especial. Este año, se avanza sobre los de Educación Secundaria: Química, Matemática, Física y Biología. También se analizaron Historia, Geografía, Lengua y Literatura.
El año que viene, en tanto, se avanzará en las carreras multiniveles: Inglés, Tecnología, Educación Física y también con los de Inicial y Primaria.