El Tribunal del juicio por el caso del marinero que provocó la muerte de una enfermera, dará a conocer el próximo jueves a las 12.00 el tipo de delito que cometió y si es culpable o inocente. Se trata del caso que tiene como protagonistas al imputado Gabriel López y como víctima a Sandra Méndez cuyos padres y hermanos viajaron especialmente desde Río Negro para seguir las instancias finales del juicio oral y público que tiene en el banquillo de los acusados a quien está responsabilizado de causar el fatal accidente.
Al momento de los alegatos, el fiscal general Osvaldo Heiber se refirió a la culpabilidad del marinero que en marzo del año pasado produjo una colisión alcoholizado y tras haber consumido cocaína, provocando la muerte de una enfermera. A la vez el querellante Romano Cominetti, coincidió con el representante del Ministerio Público Fiscal y pidió al tribunal que se le impute el delito de “homicidio simple con dolo eventual”. Este delito prevé penas que van desde los 8 a los 25 años de prisión. Fue en la audiencia de alegatos que se realizó en la Oficina Judicial de Rawson, en la etapa final del juicio oral y público iniciado la semana pasada.
El imputado es Gabriel López, un marinero oriundo de Mar del Plata y capitán de un barco del Puerto de Rawson, al momento del accidente. Viajaba en su camioneta Dodge Journey desde Trelew hacia Rawson, luego de haber consumido bebidas alcohólicas y cocaína. Sandra Méndez fue la víctima fatal. Tenía 46 años y era madre de una pequeña niña. Al momento del fatal hecho se dirigía a trabajar a una clínica de Trelew en su WW Gol. El choque causado por el marinero se produjo entre las 7.20 y las 7.25 del 19 de marzo del año pasado, en el acceso a Rawson por la ruta provincial 7.
La audiencia de alegatos fue presenciada por los padres y hermanos de la víctima fatal que viajaron especialmente desde la ciudad de Choele Choel, en Río Negro para estar en las instancias finales del juicio oral y público. Tras los alegatos, se cree que sobre fines de esta semana el Tribunal dé a conocer el veredicto sobre si López es culpable o inocente del delito que se le reprocha. El tribunal está integrado por los jueces Ivana González, María Tolomei y Fabio Monti. Maniobras “temerarias”.
Al momento de alegar el fiscal general Osvaldo Heiber dijo que puntualmente fueron cinco los testigos que dieron cuenta de las maniobras imprudentes y “temerarias” de López, hasta que se cruzó de carril y dar de frente con el vehículo que conducía la víctima fatal. También dio cuenta del propio reconocimiento que en el juicio hizo López de haber producido el accidente. Heiber también dio cuenta de los testigos y los análisis científicos que probaron en el juicio el consumo de alcohol y de cocaína por parte dela marinero en momentos previos al accidente. Puntualmente afirmó que el testigo Oscar Giovanelli “dio cátedra sobre los efectos del alcohol y la cocaína en el ser humano que los consumen” y cómo se potencian sus efectos.
Mantuvo la imputación original, pero destacó que subsidiarmente la fiscalía postula también la imputación de homicidio culposo doblemente agravado por la ingesta de alcohol y cocaína. “Quiero que el tribunal tenga en cuenta que no sólo se ha perdido una vida, sino que también se ha destruido una familia y que una pequeña niña ya no tiene a su madre”, indicó Heiber al finalizar su alegato.
“Pudo haberlo evitado”
Por su parte el querellante Romano Cominetti, dijo que el accidente fatal “pudo haberse evitado”, a raíz de los numerosos automovilistas que a lo largo de la ruta 7 entre Rawson y Trelew, le realizaron señas de luces y bocinazos por sus maniobras imprudentes bajo los efectos del alcohol y la cocaína “que quedó acreditado científicamente que había consumido, drogas además que se potencian una con la otra tal como lo explicó claramente el testigo Oscar Giovanelli”.
Adelantándose a la postura del defensor de López, el abogado Matías Cimadevilla y la posibilidad de que no pudo evitar la colisión porque el marinero fue encandilado por el sol, el querellante Cominetti dijo que “no invadió el carril contrario sino que se cruzó al carril contrario. No estaba en condiciones de conducir y no le importaron los resultados de su imprudencia”. Agregó que “los peritos y testigos nos permiten además asegurar que el sol aún no había salido”.
Concluyó que el marinero “era consciente de su conducta y tenía previsto que podía causar un accidente. Además varios automovilistas se lo advirtieron. Pero se sentía omnipotente y no tuvo en cuenta las posibilidades que tuvo de detener su marcha a lo largo de todo el trayecto, entre Rawson y Trelew. Le sobraron motivos para detenerse y no los hizo”, destacó el querellante.
“Fue encandilado por el sol”
Para el defensor de López, su cliente fue encandilado por el sol y esta fue la causa del accidente. Basó su conclusión en los dichos de uno de los peritos que al salir de Trelew para dirigirse a su trabajo en Rawson, le hizo un comentario a su acompañante sobre los efectos nocivos para los conductores la posición del sol. Minutos después se encontraron con el accidente, unos 400 metros antes de llegar a la rotonda de acceso por ruta 7. Cimadevilla expresó que esa fue la única referencia que hizo el perito sobre las causales del accidente “porque nada se le preguntó sobre las consecuencias en el hecho que pudieron haber producido el alcohol y la cocaína”.
Agregó que la cantidad de alcohol consumido “no fue suficiente como para haber perdido la conciencia” y provocar el accidente. También cuestionó la calificación legal escogido por el fiscal Heiber que hizo que el marinero haya aguardado el juicio oral en prisión. “A López nunca se le cruzó por la cabeza que podía provocar una muerte, iba con las luces encendidas y a baja velocidad”. Concluyó en que en este caso se está frente al delito de “homicidio culposo” con penas menores a las previstas por los acusadores. Al respecto citó jurisprudencia sobre casos similares ocurridos en nuestra zona que terminaron en “probation” o juicios abreviados con penas en suspenso. “Es una barbaridad que mi cliente haya llegada preso a este juicio. Lleva preso un año y dos meses. El no salió a la ruta con intenciones de matar. Es un pescador, no un asesino”, concluyó el defensor del marinero.