Los empleados de Sedamil pararon la planta ayer a la mañana en reclamo de sueldos y el aguinaldo, y retomaron su actividades por la tarde, tras dictarse la conciliación obligatoria.
Los gremios AOT y Setia mantuvieron una audiencia con representantes de la empresa en la Secretaría de Trabajo de Trelew. El personal nucleado en ambos sindicatos se apostó en el ingreso de la fábrica para manifestar sus reclamos.
Luego de debatir durante dos horas en la Secretaría Trabajo, las partes no consiguieron llegar a un acuerdo para terminar con el pago escalonado de mensuales y quincenales. Los gremios habían acordado parar ayer y hoy, pero la conciliación los obligó a suspender por 15 días hábiles las medidas de acción directa. La empresa y los gremios volverán a reunirse este lunes.
El secretario general de SETIA, Alejandro López, tras la fallida audiencia comprendió las dificultades que tiene la empresa, pero recalcó que «los trabajadores vienen soportando hace un año estas dificultades para percibir los salarios». Mencionó que «en las vacaciones pagaron en cuatro veces, fuimos suspendidos y perdimos el 30 por ciento del sueldo, y hoy siguen pagando escalonado». También añadió que recién van a percibir la totalidad del aguinaldo entre agosto y septiembre.
Por su parte, el delgado de Setia, Gonzalo Flores, durante la protesta en la puerta de fábrica del Parque Industrial, mencionó que las dilaciones con el pago de aguinaldo «generaron más discordia con el personal», que se sumó al malestar que ya venían arrastrando con el pago escalonado. Refirió que Sedamil «había prometido regularizar los pagos en marzo y abril», pero lejos de esto la situación sigue empeorando.
SIN ACUERDO
El delegado de Trabajo, Patricio Rivera, sostuvo que durante la audiencia de ayer Sedamil se remitió a exponer que «bajo condiciones de medida de fuerza no iba a negociar nada», razón por la cual no hubo ningún acuerdo de partes.
También puntualizó que al margen del reclamo salarial, los gremios plantearon que hay conflicto con el personal que dispuso la empresa para organizar la producción, «que trata de mala manera a los trabajadores, y hace exigencias con las que no están de acuerdo». Consideró que «solucionar este problema interno en la planta» podría ser el principio para resolver el conflicto.
El Chubut