El procurador general de la Provincia, Jorge Miquelarena, destacó el trabajo de los fiscales en las causas que investigan presuntos delitos contra la Administración Pública. Se mostró preocupado por las dificultades para ocupar cargos y pidió a la Legislatura la aprobación de la reforma que descomprime las tareas de los fiscales en causas con penas menores a tres años.
Miquelarena dialogó con EL CHUBUT y reconoció que el despliegue de la Unidad de Imvestigación de Delitos Contra la Administración Pública generó un acercamiento entre la justicia y la sociedad.
«Yo creo que esto generó un acercamiento con la sociedad», remarcó el Procurador, quien fundamentó esta expresión con un informe elaborado por el INDEC.
«Tengo una estadística hecha por el INDEC de antes que se iniciaran estas causas, en donde se observaba al Ministerio Público Fiscal de Chubut bastante mejor posicionado que la media del país en relación a la confianza de la ciudadanía», precisó Miquelarena.
El informe determina que la confianza de la sociedad en el Ministerio Público Fiscal del Chubut asciende al 52,1%, contra el 43,4% del promedio del resto del país.
Miquelarena recordó que estas cifras fueron previas a las causas de corrupción que comenzaron con una ola de detenciones a partir de marzo de 2018, con lo cual pronosticó que «quiero creer que con estas causas la consideración del Ministerio Público Fiscal a nivel sociedad ha crecido mucho».
RESPALDO A FISCALES, PERITOS Y CONTADORES
El líder de los fiscales de Chubut distinguió el trabajo de los fiscales, a los que catalogó como «la cara visible», pero no se olvidó del resto del equipo: «Detrás de los fiscales tenés policías de investigación, contadores, peritos informáticos y funcionarios administrativos que trabajan a destajo».
Sobre el avance de las causas que investigan delitos de corrupción, Miquelarena afirmó que «estoy muy satisfecho», principalmente porque al menos tres de las causas más importantes y más voluminosas «ya estén presentadas las acusaciones, y en algunas de ellas ya próximo a iniciarse el debate, por ejemplo en la del Embrujo».
«Se hizo un trabajo de investigación extraordinario y ahora esperemos que se vea plasmado en la audiencia de debate», puntualizó.
POCA OFERTA PARA OCUPAR CARGOS
Recientemente el Consejo de la Magistratura convocó a concursos públicos para cubrir cargos pertenecientes al Poder Judicial, entre ellos, tres fiscales generales para la ciudad de Comodoro Rivadavia, Trelew y Sarmiento.
Miquelarena no ocultó su preocupación por la falta de oferta para estos cargos y atribuyó esta complejidad a la extensa carga de tareas que tienen bajo su órbita los fiscales generales. Por estos motivos, pidió enfáticamente la necesidad de que la Legislatura apruebe una modificación a la Ley Orgánica del Ministerio Público Fiscal para descontracturar la labor de los fiscales.
«El Ministerio Público Fiscal tiene varios cargos sin poder cubrir desde hace un buen tiempo», indicó el Procurador General a diario EL CHUBUT.
Miquelarena advirtió que la difusión para ocupar estos cargos es constante, aunque hay resistencia por la gran tarea que demanda.
Explicó que el problema «es por la carga de trabajo», dijo Miquelarena, quien agregó que actualmente «tengo 35 fiscales generales en toda la Provincia, por eso quiero que me aprueben los diputados la modificación de la Ley Orgánica nuestra, porque ahí creamos un cargo intermedio entre el fiscal general y el funcionario para que este cargo intermedio pueda ir a los debates con penas no superior a tres años».
En forma gráfica, dijo que «si hoy me encuentro con un hurto, tengo que sentar en la audiencia a un fiscal general, el mismo fiscal general que está investigando los delitos de homicidio, las violaciones o los delitos contra la Administración Pública. Es un disparate».
Lamentó que en los últimos cinco años «se fueron 10 fiscales generales», de los cuales la mayoría concursó para ser juez.
«Yo creo que la complejidad, la exposición y el estar todo el día en la trinchera, los cansa. Entonces, para evitar semejante sangría, para evitar dejar de convertirnos en una escuela de jueces, tengo que buscar aliviarles un poco la tarea», finalizó Miquelarena.