La autopsia al cuerpo de Connor Betts, el atacante de Dayton, Ohio, Estados Unidos, que el pasado 4 de agosto mató a nueve personas antes de ser abatido, reveló la presencia de cocaína, alcohol y un ansiolítico en su cuerpo, informaron anoche las autoridades.
Al dar a conocer los hallazgos preliminares de la autopsia, el forense del condado de Montgomery, Kent Harshbarger, indicó que además fue hallada una pipa y una bolsa con cocaína que Betts portaba.
Betts llevaba una máscara y un chaleco antibalas cuando el domingo 4 de agosto comenzó a disparar un rifle de asalto en una zona de vida nocturna de Dayton, una localidad de 170.000 habitantes en el suroeste del estado de Ohio, en el medio oeste de Estados Unidos.
Harshbarger indicó en una conferencia de prensa que además del estupefaciente y del alcohol, en el cadáver se detectó un medicamento usado para tratar trastornos de ansiedad y de pánico, consignó la agencia de noticias EFE.