Mauro Federico estuvo presente en el programa del sábado de Mirtha e hizo referencia a su libro «Familia adicta, un padre y un hijo cuentan cómo es salir del infierno».
En el libro relata el proceso que tuvo que atravesar con su hijo Ariel para que este deje de consumir drogas. El joven, que ahora tiene 26 años, comenzó a consumir marihuana a los 11 años.
«Ariel estaba en lugares que no tenía que estar, con compañías que no debía tener. Él formaba parte de una banda de garage con chicos de 22 años. Ellos llegaron a naturalizar que él fumara. El libro está escrito en primera persona. Yo jamás consumí, pero la adicción es una enfermedad que te dobla la vista y te saca perspectiva», expresó el periodista.
Además, sostuvo que la familia participó del tratamiento, pero que fue un proceso largo y tortuoso: «Cuando entran en el vicio no saben cuándo se sale. Todo depende de la evolución. A los 13, en un almuerzo familiar, él me preguntó si podía tener una planta de marihuana en el placard. Obvio que me negué, pero mis amigos me decían que seguro lo vio en la televisión y de ahí sacó la idea. A los 16 todo se le fue de las manos y me pidió ayuda».