En tanto, el costo de la Canasta Básica Total subió también el 52,8% durante al año pasado, con lo cual una familia necesitó alcanzar ingresos por $.38.960,33 para no caer debajo de la línea de la pobreza.
Según el informe de la dependencia oficial, la Canasta Alimentaria, que mide la evolución de los precios de productos alimenticios necesarios para la subsistencia, y que marca el umbral por debajo del cual se cae en la línea de indigencia, registró en diciembre una suba del 3,2 %.
En tanto la Canasta Total, que mide la necesidad de alimentos y bebidas, indumentaria y el pago de servicios, subió en el último mes del año 3,6% respecto a noviembre.
La última medición del Indec, dada a conocer en octubre sobre datos del primer semestre del año, registró que el 35,4% de los habitantes estaban por debajo de la línea de la pobreza, y, dentro de ellos, el 7,7% eran indigentes.