Horas antes de que se aplicaran las medidas, el ministro de Salud Ginés González García, había dicho: «Vamos a aplicar un protocolo distinto a los pasajeros que vengan de Italia. Van a aterrizar en una plataforma distinta y ahí van a tener un control también distinto y van a firmar inclusive una declaración jurada diciendo que no han sentido ningún tipo de síntoma».
Semanalmente arriban a Ezeiza una doce de vuelos directos procedentes de Italia, a los que hay que sumar los pasajeros que, desde ese mismo destino europeo, arriban a través de conexiones, en especial vía España o Brasil.