España registró hoy 399 nuevas muertes por coronavirus, la menor cifra diaria de fallecidos de las últimas cuatro semanas, que eleva el total de víctimas fatales a 20.852 personas, mientras los infectados superaron la barrera de las 200.000 personas.
El número diario de fallecidos cae por tercer día consecutivo y por primera vez debajo de la barrera de las 400 personas, superada el pasado 23 de marzo. Ayer, los muertos fueron 410.
Por el lado de los contagios, se registraron 4.266 nuevos, un 2,1% más, lo que incrementa el número total de personas diagnosticadas hasta 200.210 personas, de acuerdo con el último balance del Ministerio de Sanidad español.
Además, 1.692 personas recibieron el alta médica, lo que eleva el número de curados a 80.587 personas.
«Por primera vez hemos bajado de los 400 fallecidos, son marcas que nos dan esperanza», afirmó Fernando Simón, el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias de España, quien diariamente valora las cifras de evolución de la pandemia.
Simón, no obstante, recordó que las actuales cifras «representan lo que pasaba hace alrededor de 10 días, y aún queda por ver el efecto de las medidas de restricción del permiso retribuido», refiriéndose al reapertura económica que se produjo en la última semana.
España entró hoy en su sexta semana de confinamiento bajo el estado de alarma decretado el 14 de marzo último por la pandemia de coronavirus con la cifra de contagios estabilizada y de fallecidos retrocediendo.
El gobierno español, no obstante, pedirá esta semana al Parlamento la extensión del confinamiento hasta el 9 de mayo en principio solo flexibilizando las condiciones de encierro a las que están sometidos los niños y niñas, quienes podrán empezar a salir a la calle unas horas a partir del 27 de abril.
Esta semana, los españoles todavía están sometidos a duras restricciones y sólo tienen permitido acudir al supermercado, a las farmacias y a trabajar cuando no es posible hacerlo de forma telemática o si son trabajadores esenciales.
Las empresas que volvieron al trabajo deben implementar estrictas medidas de seguridad y distanciamiento social, mientras el gobierno recomienda y facilita a los ciudadanos la utilización de barbijos en la calles.
Uno de los inconvenientes al que se siguen enfrentando los ciudadanos es la escasez de barbijos o su elevado precio, de ahí que el Ejecutivo dictaminó una orden para que en 48 horas se regule el precio máximo de los barbijos, que pueden llegar a costar hasta 4 euros.
Por su parte, el gobierno regional de Cataluña distribuye de forma gratuita a sus ciudadanos 1,5 barbijos a través de las farmacias.
Por sus parte, el presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, se reunió por videoconferencia con el conservador Pablo Casado, líder del Partido Popular (PP), la principal fuerza de la oposición, quien se resiste a sumarse a la mesa «de reconstrucción» que propuso a todos los partidos con representación parlamentaria y organizaciones de la sociedad civil del país, señaló Télam.